Cosas que pasan en nuestra insólita gastronomía vernácula. Que pagues un bife el equivalente a 100 dólares ó que a 4 personas les cueste una comida apenas 46.000 pesos, es decir menos de 32 dólares. Esto último nos sucedió en La Chancha y los 20, la parrilla de Devoto que es furor por su relación precio calidad.
Hecho esto, les contamos. El viernes pasado, 26 de julio, fuimos con Julián de Dios y nuestras respectivas esposas a La Chancha y los 20, sin dudas uno de los restaurantes que más nos ha sorprendido este año en el largo peregrinar al que nos somete la profesión.
Pedimos el "Costillar a lo Bestia", compuesto por cuatro enormes costillas de asado al asador, carne muy tierna y con un punto de cocción adecuado tratándose de esta modalidad de asar; tres empanadas de carne y una montaña de papas fritas.
A esto se que agregó una botella de López Malbec (la casa solo trabaja vinos de línea media de precios acordes a lo que sirven para comer), una ensalada de rúcula y parmesano, dos botellas de Eco de los Andes de un litro y medio, más un flan mixto de postre.
Todo esto (y terminamos saciados), costó $ 46.140 ($ 28.990 la "Bestia"; $ 5.690 el vino -más barato que en cualquier súper-; una ensalada de rúcula y parmesano a $ 3.690; $ 2.390 cada agua (no es la porquería filtrada que hoy está de moda sino botellas de un litro y medio de Eco de los Andes), y $ 2.990 el flan.
Encima no te cobran servicio de mesa. Por más que haya mucha gente afuera esperando mesa, no te apuran y podés hacer sobremesa. No te traen la cuenta sin que la pidas, como hacen en Kansas, por ejemplo.
Es un lugar sin lujos innecesarios, te atienden cordialmente y te vas con la sensación de haber disfrutado de una comida de muy buen nivel pagando muy poco por ello.
En La Chancha y los 20 las tenés todas a favor. Y como la gente no es tonta, siempre está con el aforo completo. Y con reposiciones de mesa. Casi surrealista.
¿Vieron cuando te llega la cuenta y te agarra un nudo en el estómago porque te cobraron un disparate? Pues aquí es todo lo contrario, si hasta te da vergüenza lo que te cobran. La Chancha y los 20, es un claro ejemplo de que cuando se quiere se puede dar de comer con las tres "b": bonito, bien y barato. Si hasta en McDonald's vas a gastar más.
Es verdad, aunque usted no lo crea, verdaderamente de Ripley's.
Si algo le faltaba a la inefable, irrelevante y obscena lista conocida como 50° Best Restaurants (que son 100 curiosamente), es que Astrid & Gastón esté ubicado en un lugar insólito: N° 81 de Latinoamérica, habiendo sido alguna vez el primero. Cuenta Gastón Acurio que le llegaron numerosos comentarios, sobre todo de gente espantada por esta falta de respeto. Sin embargo, las reflexiones del chef peruano no dejan de sorprender por su cuota de humildad, una virtud que no abunda precisamente en este gremio de egocéntricos.
Escaleras arriba, en el living, Winston Club invita a descubrir la cocina de Jonás Alba y Jeremías Cacino, chef y souschef, respectivamente. Una propuesta que, como ellos mismo la definen, se apoya en cuatro pilares: historia, tradición, memoria y producto.
El miércoles 26 de noviembre, desde las 20:00, tendrá lugar una nueva edición de "La Huella de los Valientes". La cita es en Berria by Sagardi y, en esta oportunidad, Iñaki López de Viñaspre recibirá nada menos que a Gonzalo Aramburu.
