Treintasillas fue un precursor en ese sistema que muchos discuten, pero que ofrece grandes ventajas a los comensales, los mal llamados restaurantes "a puertas cerradas" que en realidad son solo "puertas ocultas".
En tiempos de cuarentena, Ezequiel Gallardo debió reinventarse como lo ha hecho la mayoría para llegar al fin de la pesadilla en las mejores condiciones posibles.
Conocimos al chef en la última etapa de Katrine, el mejor restaurante de la década del '90, que marcó una época en Puerto Madero cuando nacía el barrio más joven de la ciudad.
Tras ello, Gallardo tuvo varias experiencias en los que dejó el sello de su estilo, basado en ingredientes nobles y un manejo excelso de esos mismos productos. En definitiva, una cocina nada pretenciosa pero de alto nivel, algo así como un elogio de la sencillez. Y un perfil bajo que se contrapone con la altura de su cocina.
Por el momento, Ezequiel está ofreciendo un menú de tres pasos los viernes y sábados. Esta semana, los día 28 y 29 de agosto habrá arancini (las croquetas sicilianas que desvelan al comisario Montalbano y el doctor Pasquano, que el chef prepara con arvejas, azafrán y romesco.
Como principal, habrá tapa de asado con puré de brócoli y aioli de tomates asados. Para el final, budín de medialunas de Bôulan y mousse de dulce de leche.
El precio de cada menú asciende a $ 1.200. En el caso de solicitar dos menús, va de yapa una botella de Séptima Obra Cabernet Sauvignon y panes de Bôulan.
Los pedidos se toman hasta el día viernes a las 17 y se retiran en Treintasillas (la dirección te la comunicarán al momento de la reserva). Si estás en el barrio (Colegiales) te lo llevan con delivery propio, o podés enviar una moto a retirarlo.
El Tropezón nació en 1896 y cerró sus puertas en 1983. Hubo 34 años de abandono, hasta que sus nuevos propietarios lograron reabrirlo y, con ello, recuperar una parte de la historia grande de la cocina de los porteños. El restaurante quedó inmortalizado por el tango "Pucherito de Gallina", que cantaba Edmundo Rivero. Los domingos de junio y julio, el famoso puchero de El Tropezón vuelve con vinos Saint Felicien incluidos.
Como se sabe, escaleras arriba en Winston Bar, nos espera un menú de pasos que varía mensualmente. Ya está disponible esta nueva degustación de 5 pasos, que se acompaña con vinos de la Bodega Catena Zapata.
