Ara's Cocina al Disco. Lara 638 Cañuelas, provincia de Buenos Aires. Teléfono: 02226-1568 2560. Martes a sábados de 20 00:30, y sábados y domingos de 12 a 16. Principales tarjetas.
Tipo de Cocina: Especialidades al disco de arado
Lugar: Cañuelas
Precio: $$$
"El alimento no abunda por más empeño que se haga; lo pasa uno como plaga, ejercitando la industria y siempre, como la nutria, viviendo a orillas del agua.
En semejante ejercicio se hace diestro el cazador; cai el piche engordador, cai el pájaro que trina: todo bicho que camina va a parar al asador".
(José Hernández (1834-1886); fuente: El gaucho Martín Fierro (1872) y La vuelta de Martín Fierro (1879).
En este caso, cambiamos el asador por el disco de arado, que al fin y al cabo es otro símbolo de la forma de cocinar en nuestra Pampa. Y aún más: al disco de arado no van a parar solo los "bichos que caminan", sino también pastas, purés, arroces, mariscos, pescados y todo lo que a uno se le ocurra.
No se sabe con certeza cuándo el hombre de campo decidió tomar el disco de arado de su posición vertical, y ponerlo horizontalmente para preparar sus comidas. El orificio ubicado en el medio ya no es seguro encontrarlo, por cuanto algunos fabricantes hacen los discos directamente como implemento de cocina y lo eliminaron.
Sí hay que decir que al disco uno debe "tomarle la mano". Y tener cuidado con los tiempos de cocción, ya que en apenas segundos se puede arruinar una preparación. En ese artefacto que se parece a una paellera, una sartén grande e inclusive un wok, los sabores se potencian.
Si los lectores piensan que al igual que con el asado al asador, el disco de arado también es machista, pues bien en Ara's se da por tierra con esta falsa premisa. Es que Ale Bernard, el dueño de casa que en 2017 tomó las riendas del lugar y le agregó el apóstrofe al Aras original (hoy es Ara's), rompió todos los esquemas otorgándole la responsabilidad de dirigir la cocina del lugar a la joven chef Yanina Gaitán. Y la verdad es que quedó demostrado que el disco no tiene género.
La decisión de comenzar el almuerzo con unas empanadas resultó un acierto. La masa está hecha en casa, la carne está picada y son jugosísimas. De sabor intenso y fritura suave.
Para los cuatro comensales, se pidieron dos medios discos y uno entero. Los más chicos son compartibles para dos personas sin problemas, el grande da para tres y algo más.
Pollo al ajillo y papas.
El primer "medio disco" fue de pollo al ajillo. Está claro que el ajo le va de maravillas a la carne de pollo, porque le otorga intensidad y un sabor particular. Quizá no sea el preferido de comensales que tienen preconceptos contra el ajo, que supuestamente cae mal, que deja mal aliento, etcétera. La realidad indica que es uno de los productos más sanos y ricos. Solo es cuestión de eliminar de nuestra mente cualquier tipo de preconcepto y disfrutarlo en platos como éste.
El segundo disco vino por el lado del cerdo, en porción pequeñas. Una de las opciones de bondiola de cerdo, en este caso ahumada y en compañía de un rico puré de papas.
Y terminamos con el "grande", de lomo y con el nombre de un toro que hizo historia, el famoso Shorthorn que fue el primero en ingresar al país desde Gran Bretaña. Y también trae remembranzas del restaurante que condujera Dante Liporace en Recoleta. En Aras el susodicho sale con lonjas de lomo vacuno, con papas a la crema.
Para el final, llegaron flan casero y brocheta "Vigilante", reversión del clásico queso y dulce que es tradición en nuestra gastronomía.
Ara's funciona en una vieja casona antigua en el centro de Cañuelas. En el local contiguo pronto se abrirá una cervecería. En el restaurante hay clima familiar, buena comida, precios amigables y buena onda. Vale la pena viajar y conocer.
Bondiola ahumada y puré de papas.
Fondo de Olla con la chef Yanina Gaitán y el propietario, Ale Bernard.
Luciano "Lucho " García no solo puso su apellido para darle identidad a este restaurante ubicado a las puertas de Nordelta, sino que también se lo cargó en los hombros para convertirlo en un éxito. Todo ello en base a su cocina noble, rica, generosa. Un lugar para sentirse cómodo y disfrutar a pleno.
Exuberancia, sabor, simpleza. Bastan tres palabras para definir a la cocina peruana en general y a la de Barra Chalaca, en particular. Pasamos el domingo por el local de Belgrano (el otro está en Palermo y se vienen algunos más). A pocas cuadras de las aglomeraciones de fin de semana en el Barrio Chino, ésta es una opción para comer rico, barato y tranquilo.
Todo nació de una charla del chef Ítalo Germán Ruberto con el gerente del Hotel Esplendor Buenos Aires Tango, ubicado en Rivadavia 847 entre Suipacha y Carlos Pellegrini. La idea fue incorporar platos icónicos de la gastronomía hotelera de la ciudad, que parecían olvidados. ¿El resultado?: recuerdos, nostalgia, una cocina para que no te olvides y de relación precio calidad excepcional.