Nunca resulta fácil cambiar 25 años de historia. Enzo Bianchi es uno de los grandes vinos argentinos y desde su irrupción en el mercado, en 1994, siempre fue un blend elaborado con uvas de San Rafael. Pero con el Gran Malbec cosecha 2017 podemos decir que la cepa emblema tiene ahora el vino que se merecía para hacer más grande su gesta. Varietal y nada menos que del Valle de Uco.
Cuando en 2016 Bianchi adquiría un establecimiento en el Valle de Uco se comenzaba a escribir una nueva historia de la centenaria bodega del sur mendocino. No era renunciar a su origen sino potenciarlo, tal como lo han hecho muchas empresas vitivinícolas que pusieron sus ojos en ese lugar que el enólogo Silvio Alberto asegura que tiene "mucho de todo".
El primer paso estaba dado. Los Chacayes alberga a los vinos de alta gama de la bodega, por cuanto allí pasaron a elaborarse en su totalidad, incluyendo el emblemático Enzo Bianchi Gran Corte, cuyas uvas siguen procediendo de Finca Asti en la tierra sanrafaelina.
En septiembre del año pasado, habíamos informado que ya estaba en las gateras la nueva versión de un ícono: Enzo Bianchi Gran Malbec.
"Este Malbec cosecha 2017 constituye un verdadero single vineyard & single parcel, ya que proviene de un lote específico con una maduración polifenólica perfecta. La baja productividad natural de esta parcela proporciona una piel crocante de gran espesor, con muy buena expresión aromática, tonos violáceos oscuros, fruta roja fresca, notas florales amalgamadas con dejos minerales que hacen de este Malbec un vino icónico y expresa perfectamente las cualidades y atributos que Los Chacayes puede ofrecer", destacaba en aquel momento Silvio Alberto, que como ya se dijo es el jefe de enología y viticultura.
Ayer mismo y con una modalidad novedosa (y obligada) tuvo lugar una cata virtual a través del Zoom, en la cual se probó este Gran Malbec que rinde homenaje a la cepa insignia y también a quien le da nombre y a la bodega que acumula más de un siglo de historia.
Los otros vinos que se incluyeron en la degustación fueron sendos exponentes de la línea Gran Famiglia: Malbec y Corte, respectivamente.
Volviendo "al Enzo" (como suele decírsele en la jerga, algo así como pasa con el famoso exjugador de River, Enzo Francescoli, anteponiéndole el artículo al nombre como hacen los mendocinos, y más allá del de por sí cambio significativo que fue elaborar un varietal y salir del pago de origen, el enólogo asegura que al destapar la botella uno encontrará también sutiles diferencias de estilo.
No es que se haya buscado o pretendido traicionar un cuarto de siglo de historia, sino adaptarse a los nuevos tiempos, innovar y repotenciar aún más, si cabe, al ícono de la bodega. Algo muy positivo.
Silvio se refiere en todo caso a la búsqueda de adaptarse a lo que el consumidor a nivel global reclama, es decir más fruta, frescura, equilibrio perfecto con la crianza en roble, que son 14 meses de barricas francesas de primer uso Para el enólogo, en su habitual informalidad, esto se podría definir con un neologismo inventado por él mismo: "chupabilidad".
De todas maneras son cambios sutiles, que no modifican el espíritu incomparable de un vino que está sin dudas entre los mayores exponentes de la vitivinicultura argentina, por obra y gracia de su sustancia y no solo del marketing o de la moda como sucede en otros casos.
Como se dijo, los Gran Famiglia componen una línea que está entre los Famiglia y el Bianchi Particular, de reciente incorporación en el portfolio de la bodega, dueños de una notable relación precio-calidad.
Aquí es donde se manifiesta más claramente el estilo que busca hoy el equipo de enología, tendiente a equilibrar la concentración y la fruta, para que los vinos sean más fáciles de beber.
En el caso del Gran Famiglia Malbec, cosceha 2017, esto se ha logrado según cuenta Silvio, porque se optó en dejar un 40% de "reserva de fruta" en tanques, mientras que el resto iba a barricas de roble durante 10 meses.
En el Gran Corte, que mantiene idéntico hilo conductor, la primera discusión fue si se utilizaba el Petit Verdot dentro del blend y en qué porcentaje, ya que se trata de una variedad que el enólogo define como "agresiva y de taninos muy presentes".
Finalmente, se optó por una mayoritaria participación del Malbec (59%), bajó significativamente el Cabernet Sauvignon respecto del pensamiento inicial (4%), para dar lugar a una mayor presencia del Petit Verdot (23%), además del 11% de Merlot y un 3% de Tannat, cepa que el enólogo utilizó por primera vez. Cada varietal se elaboró por separado y se hizo un "blend en caliente" al decir de Silvio Alberto.
Esta línea tiene un valor de mercado sugerido del orden de los $ 950. Todos los vinos descritos y el resto del portafolio de la bodega (incluido claro está el Enzo Bianchi tradicional de corte) pueden adquirirse a través de la tienda online propia, o por los canales habituales de distribución y venta que se encuentran disponibles durante la cuarentena.
Con el Blend Gran Corte 2022, el Rosé Fumé Incoronata y el Gran Malbec, CUPRA continúa celebrando el legado familiar que comenzó Don Remo Angelici en Italia y, que hoy, está unido al corazón del Valle de Uco.
Comprometido con su espíritu innovador, Peñón del Águila continúa proponiendo ideas y productos que enriquecen nuestra experiencia de beber. Es por eso que Gin Errante, cerveza Gosedera, Isabella vermú con soda y cerveza LIT llegan a los bares para sumarse a las nuevas tendencias de consumo.
En el marco del Museo Nacional de Bellas Artes, Achaval Ferrer presentó ante periodistas, sommeliers, empresarios gastronómicos y dueños de vinotecas, la nueva cosecha de su trilogía de vinos: Achaval Ferrer Fincas. Se trata de una colección de tres etiquetas de Malbec Single Vineyard, provenientes de viñedos centenarios: Achaval Ferrer Finca Bella Vista, plantada en 1910; Achaval Ferrer Finca Mirador, plantada en 1921 y Achaval Ferrer Finca Altamira, plantada en 1950.
