Somos todos católicosMiércoles, 6 de noviembre de 2019Gustavo Miragaya es publicista y amante del vino. Tuvo un berretín y lo cumplió: hacer sus propios vinos. De su alianza con el enólogo Philippe Caraguel salió La Sangre de Cristo.
Aun los que conocemos poco de religión, sabemos que en el Cristianismo el vino es un simbolismo del sacrificio de la muerte. Jesucristo se desangró en la cruz y su sangre se derramó por doquier. Cuentan que el origen de "la sangre de Cristo" se remonta a la Ley Mosaica: el sacerdote debía ofrecer sangre de animales al menos una vez al año, para expiar los pecados del pueblo. La Sangre de Cristo es entonces el vino.
Y con ese nombre el publicista Gustavo Miragaya bautizó a sus vinos, que comenzó a elaborar casi como un hobby. La marca es Costa Miragaya, que aúna el apellido de su esposa (Costa) con el propio: Miragaya (él intuye que en realidad es Miragaia).
Tuvimos la oportunidad de probar sus vinos en un almuerzo privado en Sagardi, momento en el que Gustavo nos contó sobre el emprendimiento para el que convocó nada menos que a Philippe Caraguel, enólogo de Bodega Atamisque, quien además elabora con su marca propia: Cepa Negra.
Así es que salió el primer hijo: La Sangre de Cristo Blend cosecha 2012, del cual quedan aún algunas botellas. En Osaka Palermo y Osaka Puerto Madero, es posible encontrar el producto en su carta de vinos. Se trata de un vino que conserva su potencial y está elaborado con uvas provenientes de viñedos de más de 70 años. Fue añejado en barricas de roble francés durante 14 meses y luego pasó otros 18 meses en botella.
El paso del tiempo ha operado magníficamente en su evolución y hoy podría decirse que está "a punto de caramelo". Según el enólogo, el color que lo identifica es el rojo granate, y la característica principal en nariz son los "frutos rojos en mermelada".
En estos momentos ya están disponibles dos nuevos vinos, en este caso de la cosecha 2018. Se trata de un blend de Malbec y Petit Verdot, y un varietal de Malbec. Gustavo tiene pensado reeditar un vino espumoso que ya se agotó: Costa de Miragaya 100% Pinot Noir.
La Sangre de Cristo es auténticamente artesanal en su concepción. Está fuera de los circuitos comerciales más grandes, porque la idea es que solo esté disponible en ciertos lugares exclusivos.
También pueden adquirirse por teléfono: + 54 11 4627 3782. O a través de la web: www.costamiragayawines.com.ar
Vale la pena, realmente. Con estos vinos y no es un sacrilegio decirlo, si se de beber La Sangre de Cristo se trata, somos todos católicos.
Gustavo Miragaya es publicista y amante del vino. Tuvo un berretín y lo cumplió: hacer sus propios vinos. De su alianza con el enólogo Philippe Caraguel salió La Sangre de Cristo.
Aun los que conocemos poco de religión, sabemos que en el Cristianismo el vino es un simbolismo del sacrificio de la muerte. Jesucristo se desangró en la cruz y su sangre se derramó por doquier. Cuentan que el origen de "la sangre de Cristo" se remonta a la Ley Mosaica: el sacerdote debía ofrecer sangre de animales al menos una vez al año, para expiar los pecados del pueblo. La Sangre de Cristo es entonces el vino.
Y con ese nombre el publicista Gustavo Miragaya bautizó a sus vinos, que comenzó a elaborar casi como un hobby. La marca es Costa Miragaya, que aúna el apellido de su esposa (Costa) con el propio: Miragaya (él intuye que en realidad es Miragaia).
Tuvimos la oportunidad de probar sus vinos en un almuerzo privado en Sagardi, momento en el que Gustavo nos contó sobre el emprendimiento para el que convocó nada menos que a Philippe Caraguel, enólogo de Bodega Atamisque, quien además elabora con su marca propia: Cepa Negra.
Así es que salió el primer hijo: La Sangre de Cristo Blend cosecha 2012, del cual quedan aún algunas botellas. En Osaka Palermo y Osaka Puerto Madero, es posible encontrar el producto en su carta de vinos. Se trata de un vino que conserva su potencial y está elaborado con uvas provenientes de viñedos de más de 70 años. Fue añejado en barricas de roble francés durante 14 meses y luego pasó otros 18 meses en botella.
El paso del tiempo ha operado magníficamente en su evolución y hoy podría decirse que está "a punto de caramelo". Según el enólogo, el color que lo identifica es el rojo granate, y la característica principal en nariz son los "frutos rojos en mermelada".
En estos momentos ya están disponibles dos nuevos vinos, en este caso de la cosecha 2018. Se trata de un blend de Malbec y Petit Verdot, y un varietal de Malbec. Gustavo tiene pensado reeditar un vino espumoso que ya se agotó: Costa de Miragaya 100% Pinot Noir.
La Sangre de Cristo es auténticamente artesanal en su concepción. Está fuera de los circuitos comerciales más grandes, porque la idea es que solo esté disponible en ciertos lugares exclusivos.
También pueden adquirirse por teléfono: + 54 11 4627 3782. O a través de la web: www.costamiragayawines.com.ar
Vale la pena, realmente. Con estos vinos y no es un sacrilegio decirlo, si se de beber La Sangre de Cristo se trata, somos todos católicos.