Alberto Giordano, chef propietario de Ike Milano, revela las nuevas preparaciones que forman parte de la carta de verano. Los platos de temporada incluyen antipasti, ensaladas, pastas y risotti, además de postres clásicos y novedosos.
Ike Milano se renueva para pasar el verano. En la nueva sección de Entradas hay opciones frías y tibias: burrata caprese, caponata de berenjenas, morrón y zucchini, y bruschetta con salsa pomodoro y mousse de burrata.
Entre los principales, el chef propone pastas renovadas: spaghetti al azafrán con zucchini y guanciale italiano; paccheri con langostinos, tomates cherries, alcaparras y aceitunas; malfatti de espinaca y ricota de búfala gratinados y con salsa de tomates frescos; sorrentone de ricota de búfala, queso parmesano y verduras de estación acompañados de salsa scarpariello.
Los risotti son el clásico con funghi porcini y como novedad, de cabutia con queso parmesano. Y la pesca está presente con la merluza negra grillada con verduras de estación. Entre las carnes, vuelve a formar parte de la carta el manzo in crosta con riduzione di Malbec.
Hay también nuevos postres, como la mousse casera de Nutella con base de crumble, y una tarta de mascarpone y frutos rojos. A su vez, se mantienen algunas recetas emblemáticas de la casa como el tiramisú della nonna.
En Ike Milano, la esencia italiana se vive tanto a través de los sabores como de la experiencia, con una atención amigable y cercana, por el mismo Alberto Giordano y su equipo, en un ambiente cálido y familiar.
Ike Milano - Dirección: Dardo Rocha 2606, Martínez - Teléfono: 4717-2993
Horarios: lunes a domingos de 12 a 15. Martes a sábados de 20 a 24. Medios de pago: Visa, Master Card y American Express.
Esta casa restaurante se convierte en el espacio único donde el agua, la tierra y el fuego se entrelazan para ofrecer una experiencia sensorial diferente. Agustín Brañas es el chef de este lugar que cuenta con tres espacios y propuestas distintas.
El sábado 10 de mayo, desde las 12:00, en el local de Palermo, la boulangerie francesa ofrecerá cuatro sándwiches fuera de carta y cócteles a cargo de la marca de aguas Perrier.
Sobre la cortada homónima, camuflado en una señorial casona de estilo Tudor, se esconde un bar con todas las características e influencias de los clubes privados londinenses. Y en la planta alta funciona un restaurante, además de un omakase de próxima apertura.