Cambiar hamburguesas industriales por una cuidada y original cocina italiana, no está nada mal. Porque justamente es Angolo, abierto en diciembre pasado, el que ocupa el espacio que antes pertenecía a una cadena de fast food, justo en la esquina que enfrenta a Happening en el Dique 4. La carta fue armada por el chef Maxi Loschiavo, en tanto que el manager Gabriel Cicero es quien se ocupa del manejo del salón y el trato con los clientes. Sin traicionar ni un ápice las recetas italianas (mayormente las del sur del país), los platos exhiben toques personales que los tornan originales y creativos.
Angolo - Alicia Moreau de Justo 292, Puerto Madero. Teléfono: 011 5722 2304. Abierto todos los días de 10.00 a 00.30 AM. Precio: $$$. Instagram: @angolo_ba
De los mismos dueños de Il Fiume, también en Puerto Madero, nació en diciembre pasado y, en una privilegiada ubicación a la altura del Luna Park, este restaurante de cocina italiana que ofrece mayormente platos de impronta meridional y toques creativos, como el uso de flores comestibles y combinaciones originales, que responden claramente a la tradición gastronómica del país que es el origen de más de la mitad de los argentinos.
La carta fue armada especialmente por el chef Maxi Loschiavo, oriundo de Carhué y de padre calabrés. Como "Cicero-ne" y permítannos el juego de palabras, se halla Gabriel Cicero, que acredita una larga trayectoria en el negocio gastronómico, desde los tiempos que lo conocimos como mozo del recordado Katrine, que hizo historia en los años '90 a pocos metros de donde hoy está Angolo.
Fue precisamente Gabriel quien nos sugirió algunos platos de la carta, que de por sí resultaban sumamente tentadores y hacían difícil la elección. Las fotos que ilustran esta nota no responden necesariamente al tamaño estándar de los platos, ya que se trató de una degustación achicada en algunos casos.
Para comenzar la seguidilla de entrantes que nos llegaban de la cocina, luego de un appetizer que se sirve a todos los clientes, disfrutamos de una original preparación que impacta a los amantes de las anchoítas (pesto, alici e pane). Sobre pan de campo tipo bruschetta, se colocaron anchoas marplatenses junto a pesto genovés, castañas tostadas y aceite de oliva extravirgen.
Paso número 2, orientado hacia la isla de Sicilia y un clásico: arancini, tomate fresco y emulsión de olivas negras. Las croquetas estaban rellenas de arroz carnaroli, ragú de hongos, mozzarella, rebozadas en migas de pan y fritas. A pedir de boca del Comisario Montalbano.
Acto seguido, la gran sorpresa: pulpo a la plancha, muy tierno, con papines y salsa verde, olivas negras y alcaparras. Un punto muy alto de la carta. Y luego, también burrata al tartufo con prosciutto (aceite de trufa negra y jamón crudo de Parma).
Era hora de pasar a los secondi. Para eso, una degustación de pastas para compartir en versión algo reducida, por razones obvias: cavatelli alla puttanesca con tomate, alcaparras, olivas negras y anchoas; pappardelle de remolacha, crema de espinaca, Patagonzola y migas de pan (al estilo siciliano), y tortelloni de hongos con emulsión de manteca trufada, brotes y flores.
Todas las pastas estaban en su justo punto de cocción, al dente. Quedaron algunos platos por probar muy tentadores, como los canelones de cordero; fagotini nero di mare, y doppio de espinaca y ricota. Y también risotto de hongos al tartufo, o de lima, langostinos y lemongrass.
Para final dulce, luego de tantos pasos, había como opciones preparaciones clásicas italianas, como tiramisú; panna cotta; affogato; spumone, y un vulcano de chocolate con pistachos (el toque diferente).
Hay una carta de vinos bien nutrida, mayormente de bodegas tradicionales y algunas etiquetas menos conocidas.
La relación precio calidad es muy buena y la atención cordial. Bienvenida sea esta nueva propuesta de cocina italiana en Puerto Madero, que responde a recetas clásicas y el agregado sutil de creatividad y modernismo.
La historia gastronómica de Danilo Ferraz, está signada por la resiliencia. Ya hemos contado el episodio que le tocó vivir, cuando en plena pandemia un grupo de empleados infieles lo dejó sin su negocio y su vivienda. Pero él supo hacer de la simpleza un hit, como es el caso de Hell's Pizza, cadena que creció exponencialmente en los últimos años. Su proyecto más personal ha sido Mil y Pico, donde recreó lo que había sido su local primigenio de pizza a la parrilla y empanadas.
Nunca nos cansaremos de repetir que los restaurantes de hoteles tienen un plus especial, que los hace únicos. Son discretos, seguros, la calidad de la materia prima está asegurada y la profesionalidad de sus brigadas está fuera de discusión. Uno de nuestros favoritos es St. Regis, ubicado en el segundo piso del Park Tower Hotel, con un amplio ventanal sobre la Avenida Leandro N. Alem. El menú actual, obra del souschef ejecutivo del hotel, Marcos Gómez, es un reflejo de la búsqueda de balance y equilibrio de ingredientes, así como mucha creatividad en el desarrollo de los platos.
Pascal Barbot supo ser considerado el mejor chef de Francia. Sin embargo, la pandemia y el cierre de su primera locación, le hicieron perder dos estrellas. La verdad es que no lo parece.