El Papa VeganoJueves, 14 de julio de 2022Gracias a que, casi simultáneamente, el Papa Francisco declaraba su "amor" incondicional hacia el dictador Raúl Castro, sus recomendaciones a los jóvenes europeos de comer menos carne para "salvar al planeta" pasaron algo inadvertidas. Curiosa manera de "ayudar" a su país, al que no ha visitado aun siendo Obispo de Roma, y que tiene a la carne vacuna como su producto emblema. Éramos pocos y parió mi abuela, justo que el chef argentino más premiado en el exterior también había un gol en contra hablando mal de la carne nacional, una afrenta. Y encima, los desinformados chefs que se fascinan con las cámaras, salieron a pegarle al trigo transgénico desarrollado por una empresa local pese a que contribuirá a tener mayor producción para que exista menos hambre en el mundo. Verdaderamente, con amigos así, ¿quién necesita enemigos?
En 1971, se estrenó la película "Con amigos así, ¿quién necesita enemigos?, una burda traducción del original inglés "Who is Harry Kellerman and why is he saying those terrible things about me?".
Pero, de todos modos, el nombre del film dirigido por Ulu Grosbard y protagonizado por Dustin Hofman, le viene como anillo al dedo a la venerada carne argentina, la mejor del mundo guste a quien gustare.
Solo basta recordar las no tan lejanas declaraciones del contradictorio chef Mauro Colagreco, el más premiado fuera de nuestro territorio y cuyo estilo nada tiene que ver con lo que comemos los argentinos. El muchacho, que además es la cara visible de una cadena de hamburguesas, había dicho que la carne argentina "ha empeorado", sumando así a los otros cocineros de la Corpo que se pronunciaron de la misma manera: https://www.fondodeolla.com/nota/17720-meando-fuera-del-tarro/
Y ahora, fue el mismísimo Papa peronista, Jorge Mario "Francisco" Bergoglio, Obispo de Roma, el que salió a recomendarles a los jóvenes europeos que "consuman menos carne para contribuir a salvar el medio ambiente". Otro más que opina sobre lo que no sabe, precisamente él, que sus buenos asados comían los curas en el Convento de Santo Domingo cuando el Cardenal se rajaba porque había mucho ruido durante las manifestaciones políticas tan frecuentes en Plaza de Mayo.
El Papa se manifestó de tal manera, al dirigir un mensaje a los participantes de la Conferencia Europea de la Juventud, que tuvo lugar esta semana en Praga.
"Es urgente reducir el consumo no sólo de combustibles fósiles, sino también de muchas cosas superfluas; e igualmente, en ciertas zonas del mundo, sería conveniente consumir menos carne, porque esto también puede ayudar a salvar el medio ambiente", dijo Francisco. ¿Sabrá el Pontífice que en tiempos lejanos el hombre vivía de la caza y de la pesca, porque no había otra forma de alimentarse? ¿Y que, actualmente, personas que habitan zonas rurales comen lo que pueden, como por ejemplo carne de especies salvajes, porque otra cosa no hay?
De todas maneras, que no se haga problema el más caracúlico de los Papas en toda la historia de la Iglesia, porque aquí nomás, en su patria de nacimiento, el actual gobierno al que tanto lo liga, ha logrado lo imposible: que los argentinos comamos menos de 50 kilos por año (récord histórico) y que hoy el alimento por excelencia sea la polenta.
Sobre llovido mojado, porque justo en estas últimas semanas un grupo de cocineros locales salió a tirar caca contra el trigo transgénico HB4 de fabricación nacional, que no solo contribuirá a alimentar a gran parte de la población del planeta, sino que será un generador de divisas para un país que tiene índices de pobreza superiores al 50%.
De paso comentamos también que, en Sri Lanka, país que ha sido noticia estos días porque un grupo de exaltados tomó el palacio de gobierno debido a la grave crisis que atraviesa la ex Ceilán, tuvo que "indemnizar a sus productores arroceros tras la debacle que causó al prohibir la importación de fertilizantes; ¿las consecuencias? Escasez de alimentos y suba de la inflación".
Esta medida había sido puesta en vigencia en mayo de 2021 y, apenas cinco meses más tarde, el gobierno debió dar marcha atrás ya que un tercio de la tierra cultivable había quedado inactiva.
Todo esto sucede cuando opinan los sabelotodo, que bajan línea porque hacerlo en las redes sociales es gratis. Claro que, por su repercusión, es mucho peor que lo diga un Papa a que opinen Mallmann, Colagreco, Narda, Martitegui, Pablo Rivero, Tomás Kalika o Julieta Oriolo (los últimos tres lo hicieron sobre el trigo transgénico, entre otros y que precisamente en FDO consideramos que son muy valiosos en su actividad).
Nunca mejor puesto eso de que "Con amigos así, ¿quién necesita enemigos?
Gracias a que, casi simultáneamente, el Papa Francisco declaraba su "amor" incondicional hacia el dictador Raúl Castro, sus recomendaciones a los jóvenes europeos de comer menos carne para "salvar al planeta" pasaron algo inadvertidas. Curiosa manera de "ayudar" a su país, al que no ha visitado aun siendo Obispo de Roma, y que tiene a la carne vacuna como su producto emblema. Éramos pocos y parió mi abuela, justo que el chef argentino más premiado en el exterior también había un gol en contra hablando mal de la carne nacional, una afrenta. Y encima, los desinformados chefs que se fascinan con las cámaras, salieron a pegarle al trigo transgénico desarrollado por una empresa local pese a que contribuirá a tener mayor producción para que exista menos hambre en el mundo. Verdaderamente, con amigos así, ¿quién necesita enemigos?
En 1971, se estrenó la película "Con amigos así, ¿quién necesita enemigos?, una burda traducción del original inglés "Who is Harry Kellerman and why is he saying those terrible things about me?".
Pero, de todos modos, el nombre del film dirigido por Ulu Grosbard y protagonizado por Dustin Hofman, le viene como anillo al dedo a la venerada carne argentina, la mejor del mundo guste a quien gustare.
Solo basta recordar las no tan lejanas declaraciones del contradictorio chef Mauro Colagreco, el más premiado fuera de nuestro territorio y cuyo estilo nada tiene que ver con lo que comemos los argentinos. El muchacho, que además es la cara visible de una cadena de hamburguesas, había dicho que la carne argentina "ha empeorado", sumando así a los otros cocineros de la Corpo que se pronunciaron de la misma manera: https://www.fondodeolla.com/nota/17720-meando-fuera-del-tarro/
Y ahora, fue el mismísimo Papa peronista, Jorge Mario "Francisco" Bergoglio, Obispo de Roma, el que salió a recomendarles a los jóvenes europeos que "consuman menos carne para contribuir a salvar el medio ambiente". Otro más que opina sobre lo que no sabe, precisamente él, que sus buenos asados comían los curas en el Convento de Santo Domingo cuando el Cardenal se rajaba porque había mucho ruido durante las manifestaciones políticas tan frecuentes en Plaza de Mayo.
El Papa se manifestó de tal manera, al dirigir un mensaje a los participantes de la Conferencia Europea de la Juventud, que tuvo lugar esta semana en Praga.
"Es urgente reducir el consumo no sólo de combustibles fósiles, sino también de muchas cosas superfluas; e igualmente, en ciertas zonas del mundo, sería conveniente consumir menos carne, porque esto también puede ayudar a salvar el medio ambiente", dijo Francisco. ¿Sabrá el Pontífice que en tiempos lejanos el hombre vivía de la caza y de la pesca, porque no había otra forma de alimentarse? ¿Y que, actualmente, personas que habitan zonas rurales comen lo que pueden, como por ejemplo carne de especies salvajes, porque otra cosa no hay?
De todas maneras, que no se haga problema el más caracúlico de los Papas en toda la historia de la Iglesia, porque aquí nomás, en su patria de nacimiento, el actual gobierno al que tanto lo liga, ha logrado lo imposible: que los argentinos comamos menos de 50 kilos por año (récord histórico) y que hoy el alimento por excelencia sea la polenta.
Sobre llovido mojado, porque justo en estas últimas semanas un grupo de cocineros locales salió a tirar caca contra el trigo transgénico HB4 de fabricación nacional, que no solo contribuirá a alimentar a gran parte de la población del planeta, sino que será un generador de divisas para un país que tiene índices de pobreza superiores al 50%.
De paso comentamos también que, en Sri Lanka, país que ha sido noticia estos días porque un grupo de exaltados tomó el palacio de gobierno debido a la grave crisis que atraviesa la ex Ceilán, tuvo que "indemnizar a sus productores arroceros tras la debacle que causó al prohibir la importación de fertilizantes; ¿las consecuencias? Escasez de alimentos y suba de la inflación".
Esta medida había sido puesta en vigencia en mayo de 2021 y, apenas cinco meses más tarde, el gobierno debió dar marcha atrás ya que un tercio de la tierra cultivable había quedado inactiva.
Todo esto sucede cuando opinan los sabelotodo, que bajan línea porque hacerlo en las redes sociales es gratis. Claro que, por su repercusión, es mucho peor que lo diga un Papa a que opinen Mallmann, Colagreco, Narda, Martitegui, Pablo Rivero, Tomás Kalika o Julieta Oriolo (los últimos tres lo hicieron sobre el trigo transgénico, entre otros y que precisamente en FDO consideramos que son muy valiosos en su actividad).
Nunca mejor puesto eso de que "Con amigos así, ¿quién necesita enemigos?