Llegó la carta otoñal al Restaurante Buono, ubicado en la planta baja del Sheraton Hotel Buenos Aires. La nueva propuesta incluye antipasti, pizzas, pastas, risotti, carnes y postres. Y, sobre todo, una muy recomendable relación precio calidad.
Buono Italian Kitchen - San Martín 1225, Buenos Aires. Teléfono: 4318-9264. Abierto todos los días desde las 6 a la medianoche. Principales tarjetas.
Tipo de Cocina: Italiana
Barrio: Retiro
Precio: $$$
Los restaurantes de hoteles lo tienen todo: seguridad, elevado estándar de calidad, servicio eficiente, buena relación precio calidad y espacios fuera del alcance de miradas indiscretas, si fuera necesario.
Buono, el restaurante de cocina italiana del Sheraton Hotel Buenos Aires, no es precisamente la excepción, sino todo lo contrario.
Con motivo del cambio estacional de carta, fuimos a probar los nuevos platos que estarán vigentes en las próximas semanas. Y de paso, comprobar cómo ha cambiado el panorama a esta altura de una pandemia que hizo estragos, pero que este año da margen como para que nos cambie el ánimo.
Por fortuna, se observó en esta ocasión mucho público comiendo en Buono un jueves por la noche. Muchos turistas de países vecinos, sobre todo, generalmente con el grupo familiar completo, aprovechando el tipo de cambio favorable. Muchos huéspedes del hotel, sin dudas.
Pese al numeroso público presente, el servicio fue tan eficaz como nos tienen acostumbrados en el hotel de Retiro.
La lista de antipasti va desde la tabla de quesos y fiambres a la sopa del día, pasando por panzanella (la tradicional ensalada de la Toscana, con el agregado en este caso de jamón crudo; la burrata con alcauciles y almendras tostadas, y los zucchini rellenos y gratinados.
En la mesa se optó por las mollejas grilladas, acompañadas por tomates a la plancha, olivas negras, mix de hojas verdes y vinagreta tibia de limón y orégano. Un planto tal vez menos tradicional que los antes mencionados, pero que aúna la fusión de tradicionales italianos con algún ingrediente local, como las mollejas.
Otra opción elegida como antipasto, fueron los calamares a la plancha con berenjenas, echalotes, morrones y suave salsa de tomates, muy recomendable.
También hay variedad de ensaladas y pizzas, en cuatro versiones: margherita, al funghi, de verduras y "alla carbonara", quizá la más llamativa, porque se trata de una preparación habitual con las pastas, trasladada a la pizza.
El capítulo de pastas es el más nutrido de la carta. Son ocho opciones: conchiglioni al pesto; fusilli alla puttanesca; linguini alla carbonara; malfatti de patate e spinaci; cannelloni di cabutia; lasagna di carne, y pasta del día. Hay además tres risotti: al azafrán, de mar, y de espinaca y jamón crudo.
Como es costumbre en la cocina italiana, luego de las pastas viene la carne. Aquí optamos por una cosa u otra, sobre todo porque en Buono los contenidos son exuberantes.
La nueva carta propone pesca del día con salsa de lima, crocante de arroz y brócoli, queso tomme (típico del Piemonte) y escabeche de gírgolas; ojo de bife con gremolata de hongos papas rotas a la plancha y ricota quemada; pollo relleno de olivas negras y alcaparras, con vegetales, gratinados y salsa romesco.
Y dejamos para el final el plato que pedimos, ciertamente recomendable: cordero braseado, polenta cremosa, hierbas frescas, queso gorgonzola, salsa del jugo de la cocción y romero.
Vale señalar que hay un "Menú Álamos", que incluye plato principal, agua y copa de vino. Y otro "Saludable", con tres opciones.
Por el lado de los postres, tiramisú Buono; manzana caramelizada y crema de canela; pannacotta al chocolate, y mousse de lima.
Vale mencionar que cada plato del menú especifica las opciones vegetarianas, así como también los que son libres de gluten.
Buono es comida sabrosa de estilo italiano y, en algunos casos adaptadas a la disponibilidad de productos locales; además de abundante, en un ambiente placentero, con servicio eficiente y precios razonables.
Exuberancia, sabor, simpleza. Bastan tres palabras para definir a la cocina peruana en general y a la de Barra Chalaca, en particular. Pasamos el domingo por el local de Belgrano (el otro está en Palermo y se vienen algunos más). A pocas cuadras de las aglomeraciones de fin de semana en el Barrio Chino, ésta es una opción para comer rico, barato y tranquilo.
Todo nació de una charla del chef Ítalo Germán Ruberto con el gerente del Hotel Esplendor Buenos Aires Tango, ubicado en Rivadavia 847 entre Suipacha y Carlos Pellegrini. La idea fue incorporar platos icónicos de la gastronomía hotelera de la ciudad, que parecían olvidados. ¿El resultado?: recuerdos, nostalgia, una cocina para que no te olvides y de relación precio calidad excepcional.
Por razón precio calidad, Cruz Omakase se destaca como un verdadero "best-buy". Sin sofisticaciones innecesarias, su propuesta permite disfrutar de una docena de pasos que van in crescendo, al tiempo que también podés optar por opciones de handrolls y una selección de etiquetas de la vinoteca vecina del mismo nombre, así como la reciente incorporación de whiskies japoneses.