Como parte de los proyectos de crecimiento de Rosell Boher, a la elaboración de vinos y espumosos de alta gama, suma su emprendimiento hotelero boutique que ahora abre su cava al público.
Rosell Boher Lodgese encuentra en Alto Agrelo, rodeado de unas 40 hectáreas de viñedos propios. Cuenta hoy con una casa de huéspedes de tres habitaciones, tres casas de viñas con su propio hogar, jacuzzi y fogón individual en cada terraza; además de ocho que se encuentran en construcción.
Además, se inaugura su nueva cava subterránea con capacidad para más de 25.000 botellas y 210 m2. Allí los visitantes encontrarán una propuesta no sólo de productos de la bodega o de la zona, sino un recorrido por los mejores exponentes de cada terruño productor de vinos de nuestro país.
Y sobre la cava misma, en su terraza, pueden desarrollarse eventos tanto sociales como empresariales de hasta 500 personas.
Algunas de las degustaciones, además de las que incorporan los productos más destacados de la bodega, recorren temáticas como Buenos Vecinos (haciendo referencia a bodegas cercanas), Zonas de la Argentina (que viaja de norte a sur por las regiones vitivinícolas del país), Cabernet Franc, Malbecs de Terroir, Grandes Enólogos, y La Nueva Generación, entre otras.
En 2017 Rosell Boher Lodge, obtuvo el premio Best of de las Great Wine Capitals al Mejor Alojamiento de vinos y en 2019, el de Mejor Desarrollo Arquitectónico representando a la Argentina.
Se trata de un proyecto destinado a la promoción turística de La Pampa y su carne vacuna de alta calidad. Busca atraer turismo nacional e internacional. Está impulsado por el Frigorífico Pico y Ohra Pampa, su marca de carne premium, junto al gobierno de la provincia.
Dice el mito urbano que, en ese predio de Retiro, dos décadas antes de que comenzara a construirse el primer hotel 5 estrellas perteneciente a una cadena internacional en la ciudad, se iba a instalar el estadio de Racing. Pero los socios votaron en contra de salir de Avellaneda, y en 1972 luego de tres años de obras se inauguraba el Sheraton Buenos Aires, en aquel momento el hotel más grande Latinoamérica. Medio siglo después, sigue siendo un ícono porteño.
Con una ubicación privilegiada sobre la Avenida 9 de Julio y a metros del Obelisco, el hotel de 298 habitaciones es el primero en levantar la bandera de Marriott en la Argentina desde 2013.