Kansas y el SarrasaniMartes, 6 de marzo de 2018El exitoso (y de dudosa calidad) Restaurante Kansas de Palermo pierde su estacionamiento, ubicado dentro de las instalaciones del Hipódromo. Pero la noticia no termina en eso: su lugar lo ocupará el Circo Sarrasani.
Hace ya cuatro años, Fondo de Olla © publicó una nota titulada "Kansas fenómeno esnob", en la cual dábamos cuenta de la mediocridad de su cocina y la falta de respeto hacia los clientes, a quienes se lo insta a abandonar sus mesas lo más pronto posible para dar lugar a las multitudes que esperan afuera con paciencia budista.
Aquella vez, defensores acérrimos del restaurante nos mandaron a pasear o directamente pidieron que nos dedicáramos a otra cosa, porque "el restaurante nació en 1999 y siempre fue exitoso".
Una cosa no tiene que ver con la otra, menos aún con la calidad gastronómica del lugar. Fue así que algunos lectores justificaban sus repetidas visitas a Kansas bien porque ahí "se levantan minas" o simplemente "porque te estacionan el auto". Pocos, casi nadie, argumentó que come en ese lugar porque les gusta la comida.
Es verdad que resulta (pronto será en tiempo pasado) toda una ventaja que los muchachos te estacionen el vehículo en lugar seguro y gratis. Pero, siempre hay un pero. Se acabó lo que se daba. La fría noticia dice que el juez nacional Carlos Goggi pidió el desalojo del estacionamiento del Restaurante Kansas de Palermo al Tattersall, con el que tenía un contrato de diez años con renovación por cinco años más, que vence indefectiblemente el 15 de mayo de este año.
Lo curioso es que en dicho predio se instalará el Circo Sarrasani, fundado en Dresden (Alemania) a comienzos del Siglo XX. El espectáculo fue declarado de "Interés por la Secretaría de Cultura de la Nación". Se desconoce si es por un tiempo o si el circo se quedará allí en forma permanente.
La Justicia indica que Kansas deberá dejar la playa de estacionamiento de 1.763 metros cuadrados, ubicada en Avenida Del Libertador 4625 a más tardar el 15 de mayo. Así culmina la disputa entre las empresas Bistró S.A. (propietaria de Kansas) y Tatersall de Palermo S.A., que actúa en nombre de Lotería Nacional, que es dueña de los terrenos.
Como Lotería está siendo disuelta por el Gobierno nacional, dentro del plan de achicamiento del Estado, Tattersal S.A. es la que litigó con la firma Bistró S.A. que a su vez consideraba que podía seguir utilizando el predio hasta 2020.
Textualmente, el juez dijo que "Bistró S.A. pretende que los contratos digan lo que no dicen y, es más, intenta que digan algo expresamente opuesto a lo que dicen de manera concreta, lo que se contrasta de manera irreversible con toda noción de transparencia".
De manera que no hay vuelta atrás. Es un misterio saber qué harán los clientes que solo van a Kansas porque les estacionan el auto. Otros ya no tendrán el último modelo para impresionar a las chicas, como decía un lector.
Ahora bien, que a ese lugar vaya un circo, parece un chiste. Aunque sea el histórico Sarrasani.
El exitoso (y de dudosa calidad) Restaurante Kansas de Palermo pierde su estacionamiento, ubicado dentro de las instalaciones del Hipódromo. Pero la noticia no termina en eso: su lugar lo ocupará el Circo Sarrasani.
Hace ya cuatro años, Fondo de Olla © publicó una nota titulada "Kansas fenómeno esnob", en la cual dábamos cuenta de la mediocridad de su cocina y la falta de respeto hacia los clientes, a quienes se lo insta a abandonar sus mesas lo más pronto posible para dar lugar a las multitudes que esperan afuera con paciencia budista.
Aquella vez, defensores acérrimos del restaurante nos mandaron a pasear o directamente pidieron que nos dedicáramos a otra cosa, porque "el restaurante nació en 1999 y siempre fue exitoso".
Una cosa no tiene que ver con la otra, menos aún con la calidad gastronómica del lugar. Fue así que algunos lectores justificaban sus repetidas visitas a Kansas bien porque ahí "se levantan minas" o simplemente "porque te estacionan el auto". Pocos, casi nadie, argumentó que come en ese lugar porque les gusta la comida.
Es verdad que resulta (pronto será en tiempo pasado) toda una ventaja que los muchachos te estacionen el vehículo en lugar seguro y gratis. Pero, siempre hay un pero. Se acabó lo que se daba. La fría noticia dice que el juez nacional Carlos Goggi pidió el desalojo del estacionamiento del Restaurante Kansas de Palermo al Tattersall, con el que tenía un contrato de diez años con renovación por cinco años más, que vence indefectiblemente el 15 de mayo de este año.
Lo curioso es que en dicho predio se instalará el Circo Sarrasani, fundado en Dresden (Alemania) a comienzos del Siglo XX. El espectáculo fue declarado de "Interés por la Secretaría de Cultura de la Nación". Se desconoce si es por un tiempo o si el circo se quedará allí en forma permanente.
La Justicia indica que Kansas deberá dejar la playa de estacionamiento de 1.763 metros cuadrados, ubicada en Avenida Del Libertador 4625 a más tardar el 15 de mayo. Así culmina la disputa entre las empresas Bistró S.A. (propietaria de Kansas) y Tatersall de Palermo S.A., que actúa en nombre de Lotería Nacional, que es dueña de los terrenos.
Como Lotería está siendo disuelta por el Gobierno nacional, dentro del plan de achicamiento del Estado, Tattersal S.A. es la que litigó con la firma Bistró S.A. que a su vez consideraba que podía seguir utilizando el predio hasta 2020.
Textualmente, el juez dijo que "Bistró S.A. pretende que los contratos digan lo que no dicen y, es más, intenta que digan algo expresamente opuesto a lo que dicen de manera concreta, lo que se contrasta de manera irreversible con toda noción de transparencia".
De manera que no hay vuelta atrás. Es un misterio saber qué harán los clientes que solo van a Kansas porque les estacionan el auto. Otros ya no tendrán el último modelo para impresionar a las chicas, como decía un lector.
Ahora bien, que a ese lugar vaya un circo, parece un chiste. Aunque sea el histórico Sarrasani.