Nos hacen bolsa

Al súper hay que ir "embolsados"

Martes, 3 de enero de 2017

En forma inesperada y sin darle tiempo a la gente a acostumbrarse, el Gobierno de la Ciudad prohibió la entrega (en realidad era venta) de bolsas plásticas para llevar las mercaderías adquiridas. Los pro y los contra de la medida.

Queremos decir en principio que en Fondo de Olla no estamos en contra de la ecología y el cuidado del medio ambiente. Cualquier medida que se tome en ese sentido, será bienvenida en tanto y en cuanto se trate de decisiones racionales.

Nos referimos en este caso a las bolsas negras y verdes que se entregaban en los súper (en realidad se cobraban 50 centavos cada una), que luego se utilizaban para tirar los residuos o levantar las heces de los perros.

La Ciudad considera que más allá de su utilidad, las bolsas plásticas se habían convertido en un problema ambiental. Cada año se repartían 500 millones de bolsas tipo "camiseta", con dos manijas. "El problema es que gran parte de esas bolsas terminaba en las calles, y así no sólo contaminaban sino que también bloqueaban los sumideros y alcantarillas, aumentando el riesgo de inundaciones", afirman desde el gobierno porteño.

Esta decisión, vale decir, ya se aplicaba en otras jurisdicciones, como Neuquén, Chubut, Río Negro y ciudades como Rosario, Villa Gesell y Bariloche, entre otros lugares.

De todas maneras, seguirán bolsas en circulación en verdulerías, carnicerías, pescaderías y los autoservicios de las estaciones de servicio. En Buenos Aires hay cerca de 2.600 hipermercados, supermercados y autoservicios. En 2012 se había decidido introducir las bolsas verdes y negras, y autorizar que los comercios las cobraran.

Con el inicio del nuevo año, los clientes de súper se encontraron con la novedad. Muchos clientes concurrían a los súper (incluidos los chinos) con las manos vacías), y la disyuntiva de cómo llevarse las mercaderías.

Mientras en Carrefour te daban la chance de comprar una bolsa por el "módico" precio de $ 25, en Coto la solución eran unas bolsas más grandes que, en apariencia, eran del mismo material que las anteriores, menos en su tamaño. El cajero nos dijo que eran "ecológicas".

CADA UNO LO INTERPRETA A SU MANERA. UNA MEDIDA COMO ÉSTA NO TIENE SENTIDO COMO PROHIBICIÓN, SINO COMO TOMA DE CONCIENCIA ECOLÓGICA Y TIEMPO PARA ADAPTARSE. PRECISAMENTE LO QUE NO HIZO EL GOBIERNO PORTEÑO.

En el negocio de la esquina, que combina verdulería y almacén, las bolsas estaban escondidas. El encargado le dijo a Fondo de Olla: "las estamos entregando a escondidas, como si vendiéramos droga". Los inspectores los obligaron a colocar un cartelito en el que mencionaban la prohibición impuesta por el gobierno porteño.

Nuestro amigo Sergio Choren nos contó su experiencia: "hecha la ley hecha la trampa. Tanto el Día como los chinos de mi barrio, tomaron textualmente la prohibición de ‘entregar o vender bolsas en las líneas de caja' y las pusieron en la góndola, como si fueran un artículo más Bolsas $ 1 c/u. Es decir que vos agarrás las que querés y en la caja te las cobran junto con todo lo que compraste".

El chef Rodrigo Caumo opinó: "le mienten a la gente, lo que hay que hacer es educar para que no sean roñosos y tiren las bolsas donde corresponde. No hay que dejar de usar, sino enseñar cómo usarlas".

Para el bodeguero Ricardo Santos eso es imposible: ¿educar? ¿A la gilada? ¿En la Argentina? Tal vez tenga razón.

Se observa que nada está claro. ¿Si en las verdulerías se pueden seguir entregando bolsitas plásticas, qué hago? ¿Pongo las papas y los tomates en la bolsa, en tanto que los fideos y el queso me lo llevo en la mano o los coloco a hurtadillas junto con los vegetales? ¿O quizá la solución será hacerse vegano?

Repetimos, más allá de la cuestión de fondo, lo que se critica es la forma en que se implementó la medida. Sin tiempo de adaptación, sin explicar las razones. Sencillamente se prohíbe, lo que está mal en este caso.

Hay antecedentes en otros países, donde las cosas son más ordenadas. Aquí, hasta se usó la figura del Presidente de la Nación para hacer propaganda sobre la toma de conciencia ecológica.

Sin embargo, Alexis Choclin, versado en Sociología, reveló lo siguiente: "en la Plaza 25 de Agosto, en Villa Ortúzar, pusieron un ‘punto verde' que es una stand de reciclado y colecta de reciclables y residuos contaminantes. Desde el 24 hasta ayer 2 de enero, está cerrado y con unas doscientas bolsas, botellas, cartones y otros que los vecinos dejaron en la vereda de la plaza. Entre los vecinos sucios y el GCBA, no hacen uno".

Lo que está claro es que si volvés del laburo y pensabas ir a comprar algo de comer en el súper, mejor andá primero a tu casa y cargá tu bolsa ecológica. De lo contrario, vas a tener que hacer malabarismo o dejarte estafar por las bolsas que te venden a mayor precio.

Los que perdemos somos siempre los mismos. Y encima nos sacaron el 5% de devolución por pago con tarjetas de débito.

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