Dorita la que PescaMiércoles, 20 de julio de 2016Se necesita audacia para abrir un restaurante solo de pescados y frutos de mar, en un país en el que la cultura carnívora (bovina) es protagonista absoluta. La Pescadorita ahora aparece renovada con la incorporación del chef Leandro Leyell.
La Pescadorita - Humboldt 1905 - Teléfono 4773-0070. Martes a domingos mediodía y noche. Tarjetas de débito y MasterCard.
Cocina: Pescados y Mariscos
Barrio: Palermo
Precio: $$$
Hay mar de fondo en La Pescadorita. Su apuesta eminentemente marítima, choca de bruces contra la cultura carnívora de la vaca, que en nuestro país ostenta el mayor consumo per cápita del mundo.
Pero el éxito de este restaurantes "de mar", demuestra que hay un público que se copa con los a veces injustamente vilipendiados frutos de mar (y del río) por culpa de algunos detractores que encima bajan línea equivocadamente.
No hace falta ser muy instruido para comprender que una dieta equilibrada requiere de variedad de carnes y de vegetales. Y los pescados son productos sanos, de fácil digestión y muy sabrosos.
La Pescadorita es entonces una "isla" dentro de una ciudad atiborrada de parrillas y pizzerías (la otra mosca blanca es Nemo). Se recuerda que en esta esquina palermitana funcionaba uno de los locales de La Dorita, hasta que uno de los socios se decidió a romper el molde.
Y ahora redobló la apuesta al incorporar al chef Leandro Leyell (ex Dill & Drinks), que le ha otorgado a la propuesta un toque de calidad que potencia aún más el nivel del restaurante. El pulpo es un ejemplo: cocinado a baja temperatura (77º C) durante cinco horas y terminado en el roner, lo que da como resultado que los tentáculos estén tiernos y con una textura que realza la calidad intrínseca de este molusco.
Adentro, en el salón, el celeste es el color que predomina. Las sillas de mimbre recuerdan a algunos de los locales donde servían docenas de platitos en la rambla marplatense. Quizás este sea el único flanco débil, porque pese a su pintoresquismo son algo incómodas.
Para quienes conozcan La Pescadorita, se encontrarán con una carta renovada, que incluye "pica pica de mar", "para arrancar", "nuestros especiales para compartir", "los principales" y "para endulzar".
LA PESCADORITA ES UNA "ISLA" ENTRE PARRILLAS Y PIZZERÍAS. PARA DELEITARSE SOLO CON PESCADOS Y MARISCOS, UNA GRAN COMILONA DE MAR.
Para comenzar, hay rabas, carnalitos, croquetas de pescado, frito mixto, almejas y mejillones, y papas bravas. Da también como para un vermú (o cerveza) a la tardecita.
Las entradas son todas aptas para celíacos (un dato a resaltar es que cada plato tiene este tipo de identificación). Hay langostinos al hierro picantones (glaseado de sricacha, lima y sésamo), gambas al ajillo, chipirones al hierro con pisto de tomate, tiradito de pescado o cebiche, pincho de pulpo grillado, y mariscos gratinados.
Los principales son para compartir, como el pulpo a la gallega ya mencionado, salmón crocante con cítricos y vegetales grillados, cazuela La Pesca, risotto frutti de mare, lenguado caprese en hojaldre, y grill con rúcula y láminas de ajo.
Hay también abadejo Tanito (con salsa puttanesca y crostón de papa y espinaca), cosa nera (fettuccine con gambas y toque de crema), spaghetti frutti di mare, risotto a la indiana (con curry) y "más langostinos".
Para el final, frutillas al Malbec con crema, torta helada de maracuyá, y Pesca la copa, para dos comensales.
La carta de vinos ofrece buenas alternativas para acompañar la comida, tanto blancos (Torrontés y Sauvignon, lo mejor, y rosados).
Hay mar revuelto, sin dudas, pero vale la pena navegar en aguas agitadas para disfrutar de este menú del tercer elemento.
Se necesita audacia para abrir un restaurante solo de pescados y frutos de mar, en un país en el que la cultura carnívora (bovina) es protagonista absoluta. La Pescadorita ahora aparece renovada con la incorporación del chef Leandro Leyell.
La Pescadorita - Humboldt 1905 - Teléfono 4773-0070. Martes a domingos mediodía y noche. Tarjetas de débito y MasterCard.
Cocina: Pescados y Mariscos
Barrio: Palermo
Precio: $$$
Hay mar de fondo en La Pescadorita. Su apuesta eminentemente marítima, choca de bruces contra la cultura carnívora de la vaca, que en nuestro país ostenta el mayor consumo per cápita del mundo.
Pero el éxito de este restaurantes "de mar", demuestra que hay un público que se copa con los a veces injustamente vilipendiados frutos de mar (y del río) por culpa de algunos detractores que encima bajan línea equivocadamente.
No hace falta ser muy instruido para comprender que una dieta equilibrada requiere de variedad de carnes y de vegetales. Y los pescados son productos sanos, de fácil digestión y muy sabrosos.
La Pescadorita es entonces una "isla" dentro de una ciudad atiborrada de parrillas y pizzerías (la otra mosca blanca es Nemo). Se recuerda que en esta esquina palermitana funcionaba uno de los locales de La Dorita, hasta que uno de los socios se decidió a romper el molde.
Y ahora redobló la apuesta al incorporar al chef Leandro Leyell (ex Dill & Drinks), que le ha otorgado a la propuesta un toque de calidad que potencia aún más el nivel del restaurante. El pulpo es un ejemplo: cocinado a baja temperatura (77º C) durante cinco horas y terminado en el roner, lo que da como resultado que los tentáculos estén tiernos y con una textura que realza la calidad intrínseca de este molusco.
Adentro, en el salón, el celeste es el color que predomina. Las sillas de mimbre recuerdan a algunos de los locales donde servían docenas de platitos en la rambla marplatense. Quizás este sea el único flanco débil, porque pese a su pintoresquismo son algo incómodas.
Para quienes conozcan La Pescadorita, se encontrarán con una carta renovada, que incluye "pica pica de mar", "para arrancar", "nuestros especiales para compartir", "los principales" y "para endulzar".
LA PESCADORITA ES UNA "ISLA" ENTRE PARRILLAS Y PIZZERÍAS. PARA DELEITARSE SOLO CON PESCADOS Y MARISCOS, UNA GRAN COMILONA DE MAR.
Para comenzar, hay rabas, carnalitos, croquetas de pescado, frito mixto, almejas y mejillones, y papas bravas. Da también como para un vermú (o cerveza) a la tardecita.
Las entradas son todas aptas para celíacos (un dato a resaltar es que cada plato tiene este tipo de identificación). Hay langostinos al hierro picantones (glaseado de sricacha, lima y sésamo), gambas al ajillo, chipirones al hierro con pisto de tomate, tiradito de pescado o cebiche, pincho de pulpo grillado, y mariscos gratinados.
Los principales son para compartir, como el pulpo a la gallega ya mencionado, salmón crocante con cítricos y vegetales grillados, cazuela La Pesca, risotto frutti de mare, lenguado caprese en hojaldre, y grill con rúcula y láminas de ajo.
Hay también abadejo Tanito (con salsa puttanesca y crostón de papa y espinaca), cosa nera (fettuccine con gambas y toque de crema), spaghetti frutti di mare, risotto a la indiana (con curry) y "más langostinos".
Para el final, frutillas al Malbec con crema, torta helada de maracuyá, y Pesca la copa, para dos comensales.
La carta de vinos ofrece buenas alternativas para acompañar la comida, tanto blancos (Torrontés y Sauvignon, lo mejor, y rosados).
Hay mar revuelto, sin dudas, pero vale la pena navegar en aguas agitadas para disfrutar de este menú del tercer elemento.