Un simpático y pequeño huarique de Villa Crespo, donde te ofrecen comida peruana, rica y sabrosa, a precio muy generoso. Se llama Ajicito Porteño, pero te ponen el picantito que vos quieras.
Ajicito Porteño - Dirección: Avenida Juan B. Justo 3447 Villa Crespo. Teléfono: 011 2009 4563 - WhatsApp: 11 6188 2441. Horarios: de jueves a martes de 12:00 a 23:00. IG: @ajicitoporteno - E-mail: ajicitoporteno24@gmail
Como todo huarique (lo que para los peruanos es nuestro bodegón, o fonda como se le llamaba antes a este tipo de lugares), en Ajicito te ofrecen platos ricos, exuberantes en cuanto a su tamaño, sazonados a gusto y piacere, con precios muy acomodados a todo tipo de bolsillo, sin lujos ni sofisticaciones.
El huarique es así, austero, familiar, clásico en sus preparaciones y atendido por peruanos que llevan la gastronomía en la sangre.
Para empezar, cómo sustraernos a la tentación de una causa, en este caso no la tradicional limeña de pollo, sino la de atún. Puede ser una entrada fácilmente compartible por tres comensales (con Prota éramos dos y así la cantidad estuvo mucho mejor).
En este rubro, uno también puede pedir los clásicos anticuchos de corazón, o su versión de mollejas; papas a la huancaína y porciones de papas, arroz y de maíz cancha.
Luego se puede entrar de lleno a los "Platos Criollos", donde no faltan el arroz con pollo; ají de gallina; tallarines verdes con bistec o con pollo frito; fettuccine a la huancaína; seco de cordero, entre otros.
En la carta también figuran los "Platos Chifa", como el arroz chaufa de pollo o de carne, o también combinado; el tradicional "Aeropuerto"; tallarín chifa de pollo o carne, o mixto, entre otras opciones.
Asimismo, están los infaltables pescados, presentes como chicharrón de pesca del día o de calamar; mero frito o a lo macho; escabeche o pescado a la chorrillana.
Optamos como plato fuerte por el picante de mariscos, con abundante cantidad de calamares, langostinos y mejillones, acompañado de su arroz.
Otro capítulo de la carta son las "Fuentes Familiares", como ceviche mixto o de pescado; jalea familiar mixta; arroz con mariscos, y chicharrón de calamar. Y para completar el ceviche de pescado, que elegimos como final de almuerzo, en este caso de gatuzo y con un picor bastante más fuerte que lo habitual para el gusto argento.
Otras opciones son el dúo marino de pescados y mariscos; leche de tigre; parihuela de pescado y mixtura de mariscos, o de mero; y sudado de mero.
Los postres son clásicos peruanos, para amantes de lo muy dulce: tres leches, suspiro limeño o cheesecake de maracuyá.
Si buscás comer bien y mucho, lejos de cualquier sofisticación y que el bolsillo no te duela, éste es sin dudas el lugar. El picor del ajicito lo ponés vos.
El Alvear Grill nació el 16 de julio de 2018 para reemplazar nada menos que a La Bourgogne, que apagó sus fuegos tras la cena de la Revolución Francesa, dos días antes y luego de una larga trayectoria en ese lugar. Es uno de los espacios históricos y más elegantes de la gastronomía porteña, ubicado dentro del Alvear Palace Hotel. Hoy el restaurante aparece renovado, a través de la incorporación del chef Leandro Di Mare y de la gerente de AA&BB, Gabriela Troncoso. Su propuesta conlleva una dualidad positiva: las carnes argentinas y una cocina de elaboración puntillosa y creativa.
Pocos días después de su apertura, Kuro Kuma ("Oso Negro" en japonés) aparece poblado de comensales en una fría noche de miércoles. Se trata de uno de los espacios más llamativos de VíaViva, el pasaje debajo del viaducto del tren a Tigre, que nace en la calle Juramento, en la entrada al Barrio Chino. La propuesta es de cocina asiática, garantizada por la sapiencia de Oscar Lin, propietario y chef de Síntesis Tapas Asiáticas, en Palermo. Para quienes prefieren la comodidad de un salón cómodo y climatizado, antes que la comida callejera al paso, sin dudas éste es el lugar a elegir.
En los confines de Villa Urquiza, Bonario es un nuevo pequeño restaurante ubicado en una estratégica esquina del barrio, sobre la Avenida Congreso. Su propuesta -creada por el chef Sebastián Iraola-, se basa primordialmente en la cocina mediterránea, con platos simples, ricos y abundantes. Está abierto todo el día y funciona además como cafetería.