La semana pasada, del jueves 6 al domingo 9 de julio, se desarrolló con récord de público una nueva edición de una de las ferias más completas e interesantes del circuito anual. Está dedicada a emprendedores y PyMes de todo el país, con especial énfasis en alimentos y bebidas, entre otros rubros.
En este país tan maltratado en tantos aspectos, asistir y disfrutar de algo que está perfectamente pensado, organizado y realizado es para destacar. Y, si se trata de una feria en la que intervienen cientos de emprendedores de todo el país, mucho mejor.
Por otra parte, por una entrada a precio más que razonable, la gente tenía la oportunidad de degustar toda clase de productos, asistir a clases de cocina con chefs conocidos y llevarse a su casa los productos que quisiera, además de comer en el lugar con todo tipo de opciones.
Más aún, a lo largo de cuatro jornadas el inmenso recinto estuvo colmado de público y cualquiera fuese el gusto o la preferencia de cada uno (bebidas alcohólicas, aceites, alfajores, dulces, embutidos, quesos, infusiones, etcétera), en cada caso había gran cantidad de propuestas, con explicaciones y asesoramiento de los propios productores.
A eso se agregaba el auspicio oficial de cada provincia, en pabellones en los que había eventos, promociones turísticas y degustaciones, además de dos espacios con pantallas gigantes en las que un desfile de chefs y bartenders iban rotando para ofrecer clases de cocina, tapeo y coctelería.
La presencia de familias enteras con chicos y grupos de amigos de todas las edades, da una idea del alcance masivo que tuvo esta propuesta. Y, lo más importante, significa una oportunidad invalorable de mostrar el trabajo de cada productor, darse a conocer, vender y tener contacto directo con el público de la Capital Federal.
Una gran oportunidad también para una importante cantidad de emprendedores y pequeños productores que no pueden subirse a las grandes cadenas o aparatos de distribución, ni tampoco logística a gran escala. Ojalá el año próximo, todos los objetivos sean tan plenamente logrados como en éste.
Se acerca el invierno y para los amantes del queso, la fondue se convierte en una gran propuesta de comida caliente para disfrutar y compartir en familia o con amigos. Santa Rosa está presente en el mercado con este producto y, de paso, nos presenta la historia de esta elaboración proveniente del corazón de las montañas suizas y cómo realizarla.
La reconocida firma española Enrique Tomás, líder internacional en jamones ibéricos, ofrece una experiencia gastronómica única en sus dos tiendas de Buenos Aires: la auténtica degustación de jamón ibérico y serrano, tal como se disfruta en España. Un lujo para los porteños.
Del 3 al 6 de julio tendrá lugar "Caminos y Sabores, Edición BNA", que este año tendrá el eje de la cocina "recasera con impronta de autor". Entre los chefs participantes, estará Lucio Marini, quien traerá sus recetas con ingredientes de la provincia.