Perdiz colorada en La LocandaJueves, 7 de julio de 2022
Hay pocas y es mejor apurarse, porque seguramente estos próximos días serán los únicos, por el momento, en los que La Locanda ofrecerá un plato exclusivo: perdiz colorada (pata en escabeche y pechuga con fondo de cocción de cordero y papas al horno).
En lo personal, comer perdices es recordar la infancia, retrotraernos a la época de un padre cazador deportivo que traía a casa esta ave (colorada, copetona, martineta). Por entonces, la perdiz en escabeche era plato omnipresente en la mesa cotidiana.
Por eso, hoy, cuando Daniele Pinna nos dijo que íbamos a probar pata y pechuga de perdiz colorada, se nos dibujó una sonrisa en el rostro.
Un plato que es emotivo, además de muy rico y prácticamente imposible de conseguir hoy en día.
Hay que apurarse porque en La Locanda lo están ofreciendo fuera de carta y el stock es reducido. Las patas las preparan en escabeche, en tanto que la pechuga se hace en la sartén y se agrega un fondo de cocción de cordero. Acompañan unas papas al horno.
El vino elegido fue nada menos que el "Amarone" argentino, un Corbec 2012 de Masi Tupungato. La entrada: prosciutto di Parma, mortadella italiana, mozzarella, brie y tomate.
Pronto publicaremos la crítica de la visita a La Locanda, previa a ésta, en la que probamos los nuevos platos de la carta. Hay cambios fuertes el ristorante de Daniele Pinna y se los vamos a contar.
Hay pocas y es mejor apurarse, porque seguramente estos próximos días serán los únicos, por el momento, en los que La Locanda ofrecerá un plato exclusivo: perdiz colorada (pata en escabeche y pechuga con fondo de cocción de cordero y papas al horno).
En lo personal, comer perdices es recordar la infancia, retrotraernos a la época de un padre cazador deportivo que traía a casa esta ave (colorada, copetona, martineta). Por entonces, la perdiz en escabeche era plato omnipresente en la mesa cotidiana.
Por eso, hoy, cuando Daniele Pinna nos dijo que íbamos a probar pata y pechuga de perdiz colorada, se nos dibujó una sonrisa en el rostro.
Un plato que es emotivo, además de muy rico y prácticamente imposible de conseguir hoy en día.
Hay que apurarse porque en La Locanda lo están ofreciendo fuera de carta y el stock es reducido. Las patas las preparan en escabeche, en tanto que la pechuga se hace en la sartén y se agrega un fondo de cocción de cordero. Acompañan unas papas al horno.
El vino elegido fue nada menos que el "Amarone" argentino, un Corbec 2012 de Masi Tupungato. La entrada: prosciutto di Parma, mortadella italiana, mozzarella, brie y tomate.
Pronto publicaremos la crítica de la visita a La Locanda, previa a ésta, en la que probamos los nuevos platos de la carta. Hay cambios fuertes el ristorante de Daniele Pinna y se los vamos a contar.