Queda en Salguero 3350, Barrio Parque. Molusca Bar es el nuevo emprendimiento de Dante Liporace, que además tendrá un segundo local en Pinamar. Para los ansiosos, les avisamos que ya comenzaron a recibir reservas anticipadas.
Junto a otros socios, los tres emprenden una nueva aventura con Molusca Bar, que tendrá asimismo una segunda versión en Pinamar, en el Hotel Playas.
El local porteño está ubicado en Salguero 3350, pasando el Paseo Alcorta y en dirección al Aeroparque.
La propuesta es eminentemente marítima, salvo una sola opción de carnes rojas, que en el debut del restaurante será una milanesa de ojo de bife madurado al vacío, con puré de papas.
Lo demás es puro mar, opción aún poco explotada en Buenos Aires. La carta incluirá ostras en cuatro versiones (contarán con un piletón para asegurar la frescura del producto); entradas frías, entradas calientes, principales y postres.
No vamos a develar toda la carta, pero podemos adelantar algunas opciones. En cuanto a entradas frías, por ejemplo, habrá tartar de salmón con salsa de algas; carpaccio de langostinos con huevas de pescado, y tablas de sushi (de 12 y 20 piezas).
Entradas calientes: bum de boquerones y cornalitos con wasabi y cebolla; rabas con mayonesa de kimchi, y mejillones con manteca Café de París.
Principales: risotto thai con shiitake y langostinos; pulpo con papas y alioli; pesca del día con dashi y guiso de arvejas.
Postres: tres versiones del clásico Don Pedro con diferentes whiskies (Johnny Walker Red, Caol Ila o Ibiki. Y también torta de chocolate y pistachos con salsa de yerba mate.
Para hacer reservas anticipadas, escribir a: reservas@molusca.com.ar (estar entre los primeros tiene sus ventajas).
El 17 de noviembre, en el marco del Día de la Baklava, Restaurant Armenia comparte una receta tradicional y una historia que trasciende fronteras. Crujiente, perfumada y bañada en almíbar, la baklava es mucho más que un postre: es un símbolo de hospitalidad, memoria y encuentro.
En una esquina de Palermo, una casa de barrio conserva algo más que historia: guarda el espíritu de Reliquia, el restaurante creado por el chef Branko Vaccaro y la sommelier Julia Bottaro. Desde su apertura, el proyecto se propuso algo inusual: que la cocina no grite, sino que dialogue, y que el servicio conserve la calidez de lo familiar.
