En tanto otro símbolo porteño como La Confitería del Molino sigue en proceso de restauración, "la Ideal" está más cerca que nunca de su reapertura. Volverán así las tardes de té, sus preparaciones tradicionales y la mística de una ciudad que se resiste a perder sus símbolos. La Bodega Catena Zapata, con su línea de vinos "históricos", estará presente para acompañar aquellos platos de la época dorada.
Mediados del año 1912, apenas habían pasado diez años desde que Nicola Catena, inmigrante italiano, había plantado su primer viñedo en Mendoza. Corrientes todavía era calle y faltaban más de tres décadas para que se mostrara como una ancha avenida jalonada con un Obelisco que se convertiría en el emblema icónico de la ciudad.
De la mano de su fundador, Manuel Rosendo Fernández, otro visionario, emprendedor emigrante de Pontevedra, Galicia, nacía la Confitería Ideal, elegante y señorial espacio de encuentro donde la sociedad de la época iba "a ver y hacerse ver", al tiempo que a disfrutar de una gastronomía que se reconocía como de las más encumbradas del continente.
Arañas francesas, vitrales italianos, muebles checoslovacos, así como mármoles y bronces traídos del otro lado del Atlántico, engalanaban el sitio por donde pasaron María Félix, Maurice Chevallier, Joan Manuel Serrat, Vittorio Gassman y Jorge Luis Borges,entre otros tantos personajes ilustres donde no faltaron políticos y presidentes.
Símbolo de una Buenos Aires glamorosa, llena de luces, a unos pocos metros de "la avenida que nunca duerme", la "Ideal" conoció momentos de esplendor que la pátina del tiempo fue opacando hasta, casi apagarse por completo.
En el año 2016 la propiedad fue adquirida por un grupo gastronómico creado por otro emprendedor, gallego también, quien comenzó su proceso de recuperación y restauración.
Estas obras, algo demoradas lógicamente por la pandemia, fueron observadas esta semana por un grupo de periodistas de la mano de Catena Zapata. Se trata de los trabajos de puesta en valor y funcionamiento de los 2.500 metros cuadrados que comprenden espacios abiertos al público y los destinados a servicios y a producción que, en breve, harán que la confitería reencienda sus luces, los hornos y los fuegos.
Esto permitirá que puedan elaborarse las tradicionales masas finas, la repostería y la gastronomía que le valieron su antigua reputación.
Volverán las tardes de té y la carta de su restaurante, que ofrecerá una moderna versión culinaria y también los platos tradicionales. Una vez a la semana, se ofrecerá a los comensales un plato de aquella época dorada de la gastronomía porteña. Esas mismas recetas que se perdieron con el cierre, esperemos que solo por reformas, de otro emblema de la gastronomía porteña, el Grill del Plaza.
Servirán clásicos como el Lomo Eduardo VII, el lenguado Belle Meunière, las Mollejas Demidoff y el Cordero a la Villeroy entre otros tantos. Estas propuestas serán acompañadas por D. V. Catena Blanco Histórico y D. V. Catena Tinto Histórico, ambos elaborados en homenaje a los vinos que en los años ‘30 eran enviados a Buenos Aires, por Domingo Catena.
Eran los vinos más finos que se elaboraban en Mendoza y que sólo se destinaban a los restaurantes y bistrós más distinguidos de la ciudad, entre los que, sin dudas, se encontraba la Confitería Ideal.
"Háganse justicia a sí mismos y no destruyan su historia", había dicho Yoko Ono en ocasión de su visita al lugar en 1998. Dos años antes, el director Alan Parker filmó en la Confitería Ideal el baile del tango "Por una cabeza", con Madonna y Antonio Banderas.
Por fortuna, casi siempre hay un mecenas que logra salvar a los sitios emblemáticos de la ciudad de la demolición y el olvido. Alguien hizo justicia por nosotros y salvó a la Ideal de la destrucción. Y una de las bodegas más importantes de la Argentina, la más conocida en todo el mundo sin dudas, hará su aporte para que todo vuelva a ser como antes, o quizás mejor.
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La Mar Buenos Aires cumplió su primera década de vida y lo celebró a lo grande, con un menú extraordinario para agasajar a amigos de la casa y la presentación del libro que pasa revista por la historia de este clásico limeño que continúa su carrera exitosa por distintos países del mundo.