Fabric sigue creciendo, ahora con un nuevo local en Villa Urquiza que se inauguró a fines de 2017. En este caso, con la propuesta de restaurante que continúa la línea iniciada con el local de Palermo Hollywood.
Fabric Nikkei & Sushi Bar- Olazábal 4518 -Teléfono: 4978-9436. Abierto todos los días mediodía y noche. Principales tarjetas.
Tipo de Cocina: Nikkei
Barrio: Villa Urquiza
Precios: $$$$
Los hermanos Pablo y Diego Dayan comenzaron su aventura gastronómica con un local de delivery de sushi, en Palermo. Luego el negocio se extendió a Colegiales y a otros sitios de la ciudad y alrededores (recientemente también en La Plata).
El mayor desafío había sido la apertura del primer restaurante, bautizado Fabric Nikkei & Sushi Bar, en mayo de 2016. Así pasaron del delivery & take away a un emprendimiento mayor. Que ahora tiene una versión en Villa Urquiza, cuya apertura tuvo lugar a fines del año pasado, en una estratégica esquina sobre la calle Olazábal y a una cuadra de Álvarez Thomas.
Además de un salón totalmente vidriado, muy cómodo, la amplitud de la vereda permite que ser hayan instalado varias mesas para quienes deseen comer al aire libre.
La carta está armada en base a especialidades peruanas, el sushi y el sashimi, más los platos principales que se engloban en la fusión nikkei.
Para empezar, trilogía de causas, mariscos al fuego, anticuchos, conchitas a la parmesana, jalea de mariscos y las infaltables cucharitas nikkei. Hay también hurumakis (rolls primavera) de carne, pollo o de vegetales. Y tres opciones de ensaladas.
Luego es el turno de los cebiches y tiraditos. Entre los primeros, el norteño es una fija (de pescado de carne blanca, más criolla y leche de tigre); o bien el amarillo y el especial (con pulpo y langostinos). La degustación de tres cebiches no deja de ser una adecuada alternativa para compartir.
Ofrecen seis variedades de tiraditos. Muy buena elección resultó el Fabric Nikkei, de salmón y pulpo con ralladura de limón y salsa ostión, equilibrado y sin que la salsa tape el sabor del pescado.
Hay luego un extenso capítulo de niguiris, sashimi y geishas, así como una amplia variedad de rolls. Y tablas combinadas a elección del sushiman. Ésta es la parte más requerida del menú, lo que se puede comprobar solo con mirar las mesas en derredor y los pedidos de la clientela, mayormente joven.
Al final, llegan los principales: risotto negro y langostinos con salsa tausi; buns de entraña glaseada en pan nippon con micromix de repollo; tataki de atún rojo con pomelo, cama de espinaca y salsa cítrica; o lomo balsámico teriyaki con cama de zanahorias e hilos de batata.
Algunos platos, señalados con asterisco en el menú, se acompañan con guarnición: puré trufado, papas a la huancaína, risotto de quinua y arroz thai son algunas de las opciones.
Esta vez se optó por la exuberante plancha de pulpo, con emulsión de cilantro y olivas, más papines a la huancaína y cebolla colorada.
Los postres están adaptados al gusto occidental: volcán de chocolate con helado de americana, o de dulce de leche con helado de banana; cheesecake de lima con mousse de mango, o de maracuyá con helado de chocolate blanco. Más sobrio el plato de frutas de estación o los helados de la casa.
Para tener en cuenta la barra de tragos y cócteles, rubro asesorado por la reconocida Mona Gallosi. Los hay clásicos, como el pisco sour y una buena selección de creaciones que vale la pena probar.
Sino vino blanco, en especial Sauvignon Blanc y Torrontés, algún rosado o bien un Pinot Noir. Y cerveza, por supuesto.
Villa Urquiza continúa subiendo la apuesta como barrio gastronómico, y esta apertura de Fabric Sushi Bar le viene de perillas.
Bestial está ubicado en el rooftop de un piso 11, aunque se nos asemeja mucho más alto todavía por lo imponente de la vista. Quizás eso sea porque si uno mira hacia el río de la Plata, no hay edificios elevados. Con la vista del cuartel del Regimiento de Patricios en primer plano, el panorama se extiende hacia las costas uruguayas. Y, adentro, todo es estridente e impactante. La propuesta nos remite hacia la culinaria nikkei, y la coctelería va acompañada de "cabezas bestiales" dentro de la cuales se colocan los vasos. Ambiente perfecto para parejas o para disfrutar con amigos, Bestial es una rara avis en Buenos Aires.
Pocas veces confluyen, al mismo nivel de eficiencia, los tres elementos esenciales de un restaurante: cocina, ambiente y servicio. Eso es lo que sentimos luego de vivir la experiencia de O-satori, el omakase ubicado en el piso 23 del Hotel Buenos Aires Marriott (ex Panamericano).
Una imponente esquina a pasos de Plaza Serrano, da lugar a este nuevo restaurante de tres plantas, donde los ahumados son protagonistas. Foga es un nombre de fantasía, según nos cuentan, que no tiene ni traducción ni significado alguno. El local impresiona por sus diferentes espacios: salón principal en la planta baja, privado en la segunda y bar que tomará relevancia con la llegada de la primavera en la terraza. Carnes, vegetales, panes y demás, todo pasado por humo.