El histórico restaurante de la Avenida Callao ofrece un menú de dos o tres pasos, que sale acompañado por una copa del nuevo vino de la línea D. V. Catena.
El Tropezón nació en 1896 y cerró sus puertas en 1983. Hubo años de abandono, hasta que sus nuevos propietarios lograron reabrirlo y con ello, recuperar una parte de la historia grande de la cocina de los porteños.
El lugar quedó inmortalizado en la voz de Edmundo Rivero, en el tango "Pucherito de Gallina". Un puchero que El Tropezón sigue ofreciendo aunque a un precio que no está al alcance de cualquier bolsillo (aunque funciona eso de "como todo lo que quiera, o pueda").
Más accesible nos parece el Menú Porteño ideado por la Bodega Catena Zapata para presentar su nuevo Clarete, de la línea D.V. Catena. Son tres pasos a $ 800, ó dos pasos a $ 650, que incluyen una copa de vino.
Hay dos opciones a elección en cada uno de los pasos. Para comenzar, Revuelto Gramajo o matambre arrollado con ensalada rusa.
Principales: colita de cuadril al horno con papas, o lomo a la pimienta con papas a la crema.
Postres: flan casero (puede agregarse crema y dulce de leche, o queso y dulce.
El Tropezónqueda en la Avenida Callao 248. Teléfono: 4371-5046.
Inspirado en la mística de "La Sociedad de los Poetas Muertos", The Book Speakeasy Bar invita a vivir una experiencia distinta en el Oeste de la ciudad: barra íntima y cócteles que homenajean a grandes pensadores del pasado y figuras influyentes de la historia contemporánea.
La Pescadorita propone un menú especial preparado por el chef David Ribulgo, para disfrutar durante los mediodías y las noches, con sabores del mar y vinos D. V. Catena.
Pedro Bargero, chef creativo del restaurante del Hotel Costa Galana, ofrece una carta protagonizada por los sabores del Mar Argentino y la Sierra de Tandilia, combinando productos de estación y distintas técnicas de cocina para crear una experiencia diferente.