Emmanuel Paglayan, uno de los propietarios de Ninina Bakery, es hijo de Marta Gueikian, la creadora de Selvi, recordada casa de pastelería de las décadas del '80 y del '90. Ofrece una cocina simple y rica, con sus infaltables tortas de autor, ahora también en el Distrito Donado-Homberg y pronto también en el MALBA.
Ninina Villa Urquiza- Holmberg 2464- Teléfono: 4832-0070. Abierto de lunes a viernes de 8 a 22, y sábados y domingos de 9 a 22. Principales tarjetas.
Tipo de Cocina: Deli
Barrio: Villa Urquiza
Precio: $$$
¿Quién no recuerda a Selvi? La casa de té que dio que hablar en las décadas del '80 y el '90. Pues bien, si alguien siente nostalgia, lo mejor es darse una vuelta por Ninina, emprendimiento comandado por Emmanuel Paglayan, el hijo de Marta Gueikian, precisamente la fundadora de Selvi.
Pero atención, porque no se trata sólo de cosas dulces. Ninina ofrece también desayunos, almuerzos y meriendas, además de cenas tempraneras (la cocina cierra a las 21.30). Y hay un plus, que son los productos artesanales, algunos de los cuales se puede llevar a casa. Todos los días sirven brunch hasta las 15, a un valor de $ 675 para dos personas (precio a septiembre de 2017), que incluye también dos cócteles.
Ninina Villa Urquiza "copia" la ambientación de su hermana menor, en la calle Gorriti. Una planta baja amplia, con visión privilegiada de la calle (en la vereda también hay mesas), el sector de pastelería al fondo y a la derecha la cafetería, que es otro punto fuerte del lugar, junto a la pastelería.
El nuevo local está ubicado a pasos de la Avenida Monroe y a una cuadra y media de la estación José M. Drago. Es decir, a minutos de Belgrano, Belgrano R, Coghlan, Villa Urquiza y Colegiales.
El espacio dedicado al café cuenta con dos tostadoras de granos de última tecnología importadas desde Holanda. Se utilizan granos de última cosecha comprados en forma directa a productores de Colombia, Brasil, Bolivia y Perú.
La clave está también en la preparación del café con máquinas espresso La Marzocco, así como profesionales entrenados por la barista Agustina Román.
En general, se trabaja tuestes más claros para lo que es brewing y tuestes medios para espresso. Los granos verdes son seleccionados en forma conjunta por Agustina Román, Gabriela Rosa Laserna y Emmanuel Paglayan.
Para el espresso, se utiliza el Blend Ninina, elaborado con granos de cafés Bolivia Caranavi Blend, Colombia Orgánico Tolima y Brasil Alta Mogiana Bourbon Amarillo. Para los diferentes brewings, ofrecen los cafés de single origin Bolivia Caranavi Cepac, Bolivia Caranavi San Bernardo, Perú Cajamarca y Colombia Nariño.
En cuanto a la propuesta gastronómica, se mantiene idéntico estilo al del local de Palermo. Es decir, platos salados, fríos y calientes a toda hora, más la pastelería y panificación que son emblemas de la casa.
El "Plato Armenio Selvi" ya es un clásico: sale con hummus, babaganoush y tabouleh. También hay una tabla de quesos y fiambres. Además, ensaladas, tarta del día y amplia variedad de sándwiches.
Las hamburguesas son otra especialidad en Ninina. La de carne vacuna, lleva queso Cheddar, panceta, ahumada, cebolla caramelizada, huevo de campo, rúcula selvática y salsa barbacoa. Y la de cordero, sale con queso feta (de cabra), cebolla colorada, brotes, espinaca y tzatziki (salsa típica de Grecia y Turquía). Hay otra con pollo de campo.
Los platos calientes son cuatro: fettuccine con pesto genovés y queso Mascarpone; risotto a la parmigiana con ossobuco braseado; pollo de campo al horno con papines asados con ajo y romero, y salmón rosado con espinacas y kale salteados.
La variedad de tortas (alguna elaboradas sin harina) y budines es amplia. Entre las primeras, la que lleva el nombre de Lola Mora incluye finas capas de avellanas, mousse de chocolate y ganache de chocolate amargo, moras y frambuesas; la Tartufo se hace con marquise y mousse de chocolate amargo, dulce de leche orgánico y merengue italiano. Y entre los budines, una versión del panforte de Siena, que aquí se llama panneforte además de otros clásicos como el de limón.
La carta de vinos incorporó nuevas bodegas, en tanto que la cerveza es artesanal y ofrece en cinco variedades (Belsh, en botellas de medio litro).
Ninina pronto estará presente con una tercera sucursal, esta vez en el MALBA. La relación costo-beneficio es impecable. Si bien su estilo es femenino, la clientela se compone de familias, parejas y hasta público masculino ávido de degustar buenos cafés, algo poco común en Buenos Aires.
Luciano "Lucho " García no solo puso su apellido para darle identidad a este restaurante ubicado a las puertas de Nordelta, sino que también se lo cargó en los hombros para convertirlo en un éxito. Todo ello en base a su cocina noble, rica, generosa. Un lugar para sentirse cómodo y disfrutar a pleno.
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