¿Cómo abrir las ostras?Jueves, 18 de abril de 2013Parece una pregunta con una respuesta difícil. Sin embargo, de la mano de nuestro especialista te ayudaremos a llegar a buen puerto. Si alguien te pregunta dónde aprendiste, decile que en Fondo de Olla
Se sujeta la ostra en la mano con un trapo de cocina. Veremos que tiene una valva plana y una cóncava.
Se introduce la hoja de un cuchillo robusto de hoja corta y fina, entre las dos valvas, hasta seccionar el músculo que las sujeta y une. Esto se logra haciendo pequeños movimientos hacia un lado y hacia otro con el cuchillo en forma paralela a la valva plana hasta que ésta se separe y la podamos desechar. Entonces podemos servir la ostra sobre su valva cóncava.
Puede ocurrir que a la hora de abrirla se desprendan virutas de nácar de la valva. En este caso, es aconsejable retirarlas cuidadosamente con el cuchillo antes de servir.
Ahora, una vez abiertas sólo nos queda degustarlas por ejemplo con unas gotas de limón y una pizca de pimienta, con unas gotas de salsa tabasco, con una vinagreta francesa de echalote (1 echalote picado y macerado en vinagre) o para quienes las prefieren cocidas: gratinadas al horno (con cilantro o perejil, vino blanco, aceite de oliva y queso parmesano). ¡Bon appétit!
Para saber más sobre ostras, te recomendamos la nota Ostras afrancesadas
Foto Flickr / flydime
Se sujeta la ostra en la mano con un trapo de cocina. Veremos que tiene una valva plana y una cóncava.
Se introduce la hoja de un cuchillo robusto de hoja corta y fina, entre las dos valvas, hasta seccionar el músculo que las sujeta y une. Esto se logra haciendo pequeños movimientos hacia un lado y hacia otro con el cuchillo en forma paralela a la valva plana hasta que ésta se separe y la podamos desechar. Entonces podemos servir la ostra sobre su valva cóncava.
Puede ocurrir que a la hora de abrirla se desprendan virutas de nácar de la valva. En este caso, es aconsejable retirarlas cuidadosamente con el cuchillo antes de servir.
Ahora, una vez abiertas sólo nos queda degustarlas por ejemplo con unas gotas de limón y una pizca de pimienta, con unas gotas de salsa tabasco, con una vinagreta francesa de echalote (1 echalote picado y macerado en vinagre) o para quienes las prefieren cocidas: gratinadas al horno (con cilantro o perejil, vino blanco, aceite de oliva y queso parmesano). ¡Bon appétit!
Para saber más sobre ostras, te recomendamos la nota Ostras afrancesadas
Foto Flickr / flydime