Haiku Sushi es una creación del polifacético empresario gastronómico Quique Yafuso, que se instaló en el barrio de Belgrano allá por el lejano 1997. Su cambio de locación, implicó también que en el mismo predio se ubiquen Mixtape, bar que funciona en la planta alta, así como el Omakase Shimada.
Haiku Sushi - Dirección:Franklin D. Roosevelt 1806, Belgrano. Teléfono: 011 3387 0977. Horarios: martes a domingos. a partir de las 19:30. Menú: https://menu.fu.do/haikusushi -Instagram:@sushihaiku.ar
Desde su apertura y locaciones distintas, siempre Haiku ha sido representativo de la gastronomía japonesa, de la mano del incansable y polifacético empresario y sushiman, Quique Yafuso. La palabra alude a un tipo de poesía japonesa breve.
Haiku Sushi nació, en realidad, de una corazonada y una gran pasión por la gastronomía de sus fundadores: dos hermanos, un redactor publicitario y una diseñadora textil. Comenzó como un emprendimiento familiar, aunque ahora solo está a cargo Quique, también dueño del bodegón Mondongo & Coliflor, Mixtape y Shimada Omakase (ambos en la planta alta de Haiku).
Haiku está inspirado en Morizono, un restaurante que fue pionero en comida japonesa al alcance de todos los porteños, cuando la mayoría de los lugares de este tipo estaba reservado a la colectividad nipona.
Mientras el sushi se iba poniendo de moda, ése fue el primer trabajo de Quique Yafuso en gastronomía. Hoy, en Haiku el mismo sigue siendo protagonista, la carta se extiende a otras especialidades como el yakimeshi (wok de arroz con verduras salteadas); gyozas de cerdo o trucha; teppanyaki de vegetales o trucha: ebi furai (langostinos rebozados en panko), y también el ramen.
Visitamos Haiku después de algún tiempo, en este constante peregrinar por los restaurantes. Como principio, hay que decir que la calidad se mantiene intacta, en esta última locación de la calle Roosevelt.
De las entradas se probó un tiradito de pesca blanca. Y las infaltables gyozas de cerdo. Pero la carta también incluye un ceviche, los ebi furai, gyozas de trucha, yakitori y harumaki de cerdo.
De la extensa carta de sushi, quizá lo más conveniente sea optar por los combinados, que incluyen nigiris y makis, en cantidades que varían desde 17 a 35 piezas. Y también los de 8 unidades de rolls, y 12 de makis. Los nigiris se pueden pedir de a 5 a 10 piezas.
Haiku ofrece, asimismo, variedad de sashimi y temakis, además de opciones vegetarianas solas o combinadas.
Por último, en el rubro especialidades, nos encontramos con pollo teriyaki; ramen; teppanyaki con pescados mixtos, pollo, trucha o verduras; yakimeshi solo o con langostinos, pollo, lomo y trucha.
La oferta de bebidas comprende una carta de vinos bien armada, de la que por el tipo de comida recomendamos los blancos y rosados, tal vez un Pinot Noir, la más versátil de las cepas. Hay vinos por copa.
No falta el tradicional sake, así como tampoco las cervezas (nacionales), que van muy bien con este tipo de comida.Haiku Sushi dispone asimismo de selección de postres, más bien occidentales, que incluye cheese cake, crème brûlée y key lime pie.
Resulta muy buena la relación precio calidad, como siempre. Una fija para degustar especialidades japonesas, que nunca fallan.
El Tropezón nació en 1896 y cerró sus puertas en 1983. Hubo 34 años de abandono, hasta que sus nuevos propietarios lograron reabrirlo y, con ello, recuperar una parte de la historia grande de la cocina de los porteños. El restaurante quedó inmortalizado por el tango "Pucherito de Gallina", que cantaba Edmundo Rivero. Los domingos de junio y julio, el famoso puchero de El Tropezón vuelve con vinos Saint Felicien incluidos.
Como se sabe, escaleras arriba en Winston Bar, nos espera un menú de pasos que varía mensualmente. Ya está disponible esta nueva degustación de 5 pasos, que se acompaña con vinos de la Bodega Catena Zapata.
