Dantte con doppia "t" Martes, 21 de mayo de 2024A Dante Liporace le ha llegado el momento de "exportar" sus creaciones culinarias. Desde hace tiempo que tenía ganas de ofrecer su propia versión de la cocina italiana, algo que le viene de sus ancestros familiares. Y hora va a matar dos pájaros de un tiro, ya que lo hará cumpliendo otro de sus objetivos: contar con propio restaurante en el exterior. Próximamente, Dantte (con doble "t") abrirá sus puertas en Madrid.
La ciudad es Madrid. La dirección: Santaengracia 32 Barrio Almagro. El restaurante, con apertura prevista para el mes de septiembre de este año, se llamará "Dantte", así como está escrito con la doppia "t".
Para llevar adelante esta patriada, el chef Dante Liporace se asoció con otros dos compatriotas: Ariel Ortega y Federico Corti.
La obra está en marcha y bastante avanzada. La ambientación es de estilo neoyorquino, y la propuesta gastronómica será, como todo lo que suele hacer el chef, muy jugada.
Es decir que hará su propia interpretación de la cocina italiana, utilizando productos de calidad y ofreciendo una tríada, en este orden, entre lo tradicional, la modalidad ítalo neoyorquina y la fusión entre lo argentino y el legado de los inmigrantes que, en diferentes oleadas, han provocado que seamos un pueblo con mayoría de raíces itálicas.
Fondo de Olla © accedió a la carta provisoria con la que se iniciará la aventura madrileña de Dantte.
Se observa el uso de ingredientes poco o nada presentes en nuestro mercado local. Por ejemplo, quesos como el Ubriaco Rosso ("borracho rojo") y el exótico Formaggio di Fossa. Y jamón San Daniele, nduja, tartufo nero y caviar.
Algunos platos son la sopa de cebolla y carrillera con balsámico, pan y flores de zucchini; pesca con erizo de mar y pomelo; macarrones con salsa de langostinos y coliflor, yema curada y picada de chorizo y pulpo.
O milanesa (cotoletta) con espuma de provolone, olivas marinadas y tomate, y ojo de bife, chimichurri de ajo negro, huevitos de codorniz, papa al pomodoro y albahaca.
Para cerrar con espuma de flan con dulce de leche, o torta Mafalda.
Lo que se dice una cocina nada convencional, basada en su esencia italiana pero también con una fuerte impronta personal del chef.
A Dante Liporace le ha llegado el momento de "exportar" sus creaciones culinarias. Desde hace tiempo que tenía ganas de ofrecer su propia versión de la cocina italiana, algo que le viene de sus ancestros familiares. Y hora va a matar dos pájaros de un tiro, ya que lo hará cumpliendo otro de sus objetivos: contar con propio restaurante en el exterior. Próximamente, Dantte (con doble "t") abrirá sus puertas en Madrid.
La ciudad es Madrid. La dirección: Santaengracia 32 Barrio Almagro. El restaurante, con apertura prevista para el mes de septiembre de este año, se llamará "Dantte", así como está escrito con la doppia "t".
Para llevar adelante esta patriada, el chef Dante Liporace se asoció con otros dos compatriotas: Ariel Ortega y Federico Corti.
La obra está en marcha y bastante avanzada. La ambientación es de estilo neoyorquino, y la propuesta gastronómica será, como todo lo que suele hacer el chef, muy jugada.
Es decir que hará su propia interpretación de la cocina italiana, utilizando productos de calidad y ofreciendo una tríada, en este orden, entre lo tradicional, la modalidad ítalo neoyorquina y la fusión entre lo argentino y el legado de los inmigrantes que, en diferentes oleadas, han provocado que seamos un pueblo con mayoría de raíces itálicas.
Fondo de Olla © accedió a la carta provisoria con la que se iniciará la aventura madrileña de Dantte.
Se observa el uso de ingredientes poco o nada presentes en nuestro mercado local. Por ejemplo, quesos como el Ubriaco Rosso ("borracho rojo") y el exótico Formaggio di Fossa. Y jamón San Daniele, nduja, tartufo nero y caviar.
Algunos platos son la sopa de cebolla y carrillera con balsámico, pan y flores de zucchini; pesca con erizo de mar y pomelo; macarrones con salsa de langostinos y coliflor, yema curada y picada de chorizo y pulpo.
O milanesa (cotoletta) con espuma de provolone, olivas marinadas y tomate, y ojo de bife, chimichurri de ajo negro, huevitos de codorniz, papa al pomodoro y albahaca.
Para cerrar con espuma de flan con dulce de leche, o torta Mafalda.
Lo que se dice una cocina nada convencional, basada en su esencia italiana pero también con una fuerte impronta personal del chef.