La frase del añoJueves, 21 de noviembre de 2019Dante Liporace estuvo en LN+ y contó su experiencia como chef de la Casa Rosada, cargo que dejará en las próximas semanas debido al cambio de gobierno, pero sobre todo para dedicarse a su nuevo restaurante, Mercado de Liniers.
Todos sabemos cómo es Dante. No se anda con medias tintas. Cuando le hice la primera entrevista para Fondo de Olla ©, apenas abierto Tarquino, tiró varias bombas al aire, lo que llevó inexorablemente a preguntarle si estaba seguro que esas definiciones eran para publicar. No tuvo problema en que reprodujéramos sus comentarios filosos.
En realidad, hoy somos amigos, nos queremos, a veces nos peleamos, respetamos nuestros trabajos y tengo el convencimiento de que Liporace dice que lo que otros colegas callan. Igual que nosotros, que decimos lo que el resto del periodismo no se anima.
En eso resulta evidente que somos iguales, uno en la cocina y el otro en la computadora, sin comparar talentos porque uno al final de cuentas apenas sabe hacerse unas pastas, cocinar polenta como le enseñó su abuelo y algunas que otras cositas más.
Ayer Dante estuvo en LN+ y tiró una frase que debería quedar en los anales de la gastronomía argentina. Lean el videograph en la foto de portada y comprobarán que tenemos razón.
Siempre que sentimos que estamos solos contra los molinos de viento aparece Dante con su lengua filosa, para darnos ánimos y seguir en la lucha que es cruel y es mucha.
Dante Liporace estuvo en LN+ y contó su experiencia como chef de la Casa Rosada, cargo que dejará en las próximas semanas debido al cambio de gobierno, pero sobre todo para dedicarse a su nuevo restaurante, Mercado de Liniers.
Todos sabemos cómo es Dante. No se anda con medias tintas. Cuando le hice la primera entrevista para Fondo de Olla ©, apenas abierto Tarquino, tiró varias bombas al aire, lo que llevó inexorablemente a preguntarle si estaba seguro que esas definiciones eran para publicar. No tuvo problema en que reprodujéramos sus comentarios filosos.
En realidad, hoy somos amigos, nos queremos, a veces nos peleamos, respetamos nuestros trabajos y tengo el convencimiento de que Liporace dice que lo que otros colegas callan. Igual que nosotros, que decimos lo que el resto del periodismo no se anima.
En eso resulta evidente que somos iguales, uno en la cocina y el otro en la computadora, sin comparar talentos porque uno al final de cuentas apenas sabe hacerse unas pastas, cocinar polenta como le enseñó su abuelo y algunas que otras cositas más.
Ayer Dante estuvo en LN+ y tiró una frase que debería quedar en los anales de la gastronomía argentina. Lean el videograph en la foto de portada y comprobarán que tenemos razón.
Siempre que sentimos que estamos solos contra los molinos de viento aparece Dante con su lengua filosa, para darnos ánimos y seguir en la lucha que es cruel y es mucha.