El jueves 4 de abril, el Restaurante Sibaris ofrecerá un menú especial a cargo de los chefs residentes Roal Zuzulich y Facundo Tochi, con vinos de la bodega Catena Zapata.
Sibaris, el restaurante del Windsor Hotel & Tower, en la ciudad de Córdoba, fue noticia el año pasado porque allí el chef Michel Bras realizó su segunda cena en el país (la otra fue en Don Julio, en Buenos Aires).
Pero además es uno de los lugares más reconocidos de la capital cordobesa. El chef ejecutivo es Roal Zuzulich, criado en Alta Gracia en una familia de gastronómicos. Trabajó en Barcelona, entre otros cocineros con Carme Ruscalleda, en San Pau, pasó por cocinas en Italia y Francia, y también en el paulista D.O.M., de Alex Atala. Actualmente, posee un emprendimiento propio en Alta Gracia, llamado Herencia.
Por su parte, el jefe de cocina, Facundo Tochi, estudió en Córdoba y en México, luego de lo cual estuvo tres años en el Palacio Duhau Park Hyatt en Buenos Aires. Asimismo, trabajó en el Restaurante Chez Nouz, del Hotel Algodón Mansión. En Francia, pasó por la cocina de Mirazur.
Ambos ofrecerán la noche del jueves 4 de abril un menú especial, con vinos de la Bodega Catena Zapata.
Como recepción se ofrecerán snacks y una copa de Saint Felicien Nature. Luego, habrá tortellini de vegetales en caldo de calabaza; pulpo, maíz y rocoto; y pesca del día con miso. Salen con D.V. Catena Chardonnay Chardonnay.
A continuación se servirá pato con membrillos, acompañado por Angélica Zapata Alta Merlot.
El plato siguiente consistirá en ojo de bife con zapallos, y copa de D.V. Catena Malbec Malbec.
Y para el final, espuma de queso azul, peras, nueces y chocolate. Y Sant Felicien Semillón Doux.
El valor del cubierto será de $ 2.200, todo incluido. Reservas: 351 6863 188.
Esta casa restaurante se convierte en el espacio único donde el agua, la tierra y el fuego se entrelazan para ofrecer una experiencia sensorial diferente. Agustín Brañas es el chef de este lugar que cuenta con tres espacios y propuestas distintas.
El sábado 10 de mayo, desde las 12:00, en el local de Palermo, la boulangerie francesa ofrecerá cuatro sándwiches fuera de carta y cócteles a cargo de la marca de aguas Perrier.
Sobre la cortada homónima, camuflado en una señorial casona de estilo Tudor, se esconde un bar con todas las características e influencias de los clubes privados londinenses. Y en la planta alta funciona un restaurante, además de un omakase de próxima apertura.