Se vienen cambios fuertes para Gonzalo Aramburu, uno de los cocineros más talentosos, quien desafío al marketing cuando se instaló en el barrio de Constitución. Ahora habrá mudanza doble, al Pasaje del Correo en Recoleta.
Cuando un joven cocinero llamado Gonzalo Aramburu irrumpió en el barrio de Constitución muchos los tildaron de loco. Sin embargo, su pequeño restó se hizo conocer a partir de una cocina vanguardista de notable factura y creatividad.
Su local de la Calle Salta 1050 pronto comenzó a llenarse de público gourmet y de turistas que llegaban avisados de que en Buenos Aires hay mucho más que buenas carnes.
Gonzalo es un tipo tranquilo, cuya personalidad no va de la mano con la de la mayoría de sus colegas. Cuesta encontrarle un rasgo de soberbia, aun cuando tiene con qué ya que lo avala una trayectoria más que valiosa. Es de pocas palabras, porque le gusta más hablar en la cocina, donde se siente más a gusto.
Sus pergaminos evitan demasiadas palabras de presentación. Pasó por las cocinas de Charlie Trotter, en Chicago; de Daniel Bouloud, de Joël Robuchon y de Martín Berasategui. Nada más y nada menos.
Poco tiempo después de la apertura de su bistró, Gonzalo abrió en la esquina Salta y Humberto Primo el Aramburu Bis, que a su vez también se trasladó al subsuelo con un bar llamado Under.
Pues bien, Fondo de Olla está en condiciones de adelantar que ambos Aramburu su mudarán al elegante Pasaje del Correo, en la calle Vicente López, en Recoleta.
En principio, el Bis ya cerró sus puertas en Constitución y, a más tardar en septiembre, reabrirá en el local donde estaba Harturo y antes Sirop Folie.
De manera que no es un cierre, sino una mudanza. Cosas del mercado inmobiliario que tenemos, donde los que se suponen vivillos terminan perdiendo por avaros.
¿Y qué pasará con Aramburu Bistró? Muy simple, antes de fin de año y sin cerrar sus puertas sino para cambiar de locación, estará exactamente enfrente del nuevo Bis, donde estaba el Sirop original.
Se le nota el entusiasmo a Gonzalo y seguro que el cambio le vendrá muy bien. El elevado nivel de su cocina se merece un lugar más elegante y con mayor cantidad de cubiertos. El esfuerzo es doble, ya que no cuenta con socios inversores. Todo a pulmón. Pronto habrá que brindar.
El jueves 14 de agosto habrá una noche especial de cata de vinos de Rutini Wines, con la oportunidad de probar algunos de los nuevos platos de la carta del Restaurante Negresco, elaborados por el chef ejecutivo del Palladio Hotel Buenos Aires, Facundo Stefano y su equipo.
En plena temporada de trufas, Puchero organiza cuatro noches únicas en su cava subterránea. Durante los sábados de agosto, se servirá un menú por pasos que combina trufa negra y vinos seleccionados. Solo cupos limitados, con reserva previa.
Brazarte, el restaurante insignia del Sheraton Bariloche, presentó su renovada carta. Bajo la dirección del chef Aníbal Ramírez, la propuesta revaloriza los sabores de la Patagonia con una mirada contemporánea, unida al territorio, al producto y a su gente.
