St Regis

La inspiración del mercado

Jueves, 24 de septiembre de 2015

De la mano del chef Javier González Alemán, el Restaurante St Regis, del Hotel Park Tower sigue apostando a los productos locales sutilmente preparados.

Restaurante St. Regis – Avenida Leandro N. Alem 1193 – Tel.: 4318-9211. Abierto mediodía y noche, principales tarjetas.

Cocina: De Autor 

Barrio: Retiro 

Precio: $$$$  

St. Regis, el restó del Park Tower, con sus enormes ventanales que ofrecen una vista privilegiada de la avenida Leandro N. Alem y parte de la plaza San Martín, se afianza en una cocina que abreva en el estilo mediterráneo, la elegancia francesa y la utilización de los productos autóctonos de mayor calidad que ofrece el mercado y que el chef ejecutivo del hotel, Javier González Alemán, utiliza con criterio. Los cambios oportunos tomados en su momento, continúan con el director de Alimentos y Bebidas, Sebastián Barchetta, quien suplantó al español Oscar Alvarez, hoy en México.

González Alemán, pasó por varios restaurantes de Barcelona (Terrani, Monestir de Sant Pere de Casserres, Hotel Meliá Barcelona y Ruta Gallega Marisquería), y también por California, donde fue encargado de la División Catering de La Brea Bagel Company, especialistas en comida kosher en Hollywood. Pero su formación se dio también en la Ciudad Condal, en la Escola de Restauraciò i Hostalatge.

En St. Regis, hay un menú disponible de seis pasos con vinos Nicasia Vineyards Blanc de Blanc Viognier y Red Blend Malbec, o directamente se puede pedir de la carta de uno, dos o tres pasos y precio fijo, sin importar los platos que uno disponga ya que éstos no tienen valor individual. Como los precios se han adaptado a lo que exige el mercado, se cobra servicio de mesa, $ 18, pero no desentona con lo que dan a cambio.

El Menú Degustación, muy recomendable por cierto, incluye aperitivo, dos entrantes (ceviche de lenguado, pulpo y maracuyá con batatas crocantes; sopa crema de calabaza al curry y langostinos); dos principales (pacú, crumble de hinojos, escalibada y salsa de mango; lomo de cordero, cremoso de zanahoria y tomillo, vegetales babies; más una degustación de postres de la carta.

Por fuera de estas opciones, el menú ofrece creaciones muy interesados, más la reafirmación de algunos platos que se mantienen, como el “preasado” argentino, esto es provoleta, chorizo, riñoncito de cordero y molleja. También hay compresión de quinua con palta hass, maíz cancha, crema de papa y pimiento; trucha curada, cremoso de guisantes, chipirones y papines. Y entre los platos “del campo, del mar y de nuestra tierra”, risotto de cebada perlada con portobellos y queso Chevrotin; magret de pato en lonjas, basmati de frutos secos, emulsión de coco, lemongrass y espinaca; ojo de bife con cocción al vacío con croûte de morcilla, rosti de mandioca y echalotes al Malbec, entre otros.

Los “momentos dulces” responden a la fina tarta de manzana con crema helada de vainilla; crema quemada de yerba mate con perfume de naranja; mousse de chocolate cocida sobre masa bretona de almendras y garrapiñada de cereales.

Un dato valorable, es que cada plato libre de TACC, o sea apto para celíacos, está identificado como tal en la carta. El servicio del Park Tower y St. Regis en particular, se caracteriza por la discreción y la eficacia. Una garantía son los mozos más experimentados como Raúl y Alfredo, que saben educar en el oficio a los más jóvenes.

Al mediodía, menú buffet con mesa fría de entradas, tres platos calientes del día y otra mesa, con los dulces. Se puede consumir todo lo que uno desee por apenas a precio muy conveniente. Un ejemplo más de que el lujo no siempre se corresponde por los precios exorbitantes, sino por la calidad de lo que uno recibe y paga en consonancia.

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