Pizzas, pastas y empanadas
De Rosa se hizo ClásicoMiércoles, 30 de octubre de 2019A Julián de Dios le gustó tanto, que repitió dos días seguidos la visita a De Rosa Clásico. Nos dejó una escueta crónica, por aquello de que "lo bueno, si breve, dos veces bueno". Y deja que las fotos que sacó hablan por sí mismas.
Para mí los restaurantes no se dividen entre los premiados y los ignotos, los caros y los regalados, los modernitos y los sucuchos.
No, para mí lo único importante es si el chef / cocinero / alma mater está en el restaurante o no. Así de simple.
Y Maurizio de Rosa, desde que lo conozco, apenas llegó de Nueva York siempre está al mando. Y se nota.
En De Rosa Clásico, su más reciente apertura hay empanadas potentes, antipasti variados, pastas deliciosas (los conchigliette al ragú de carne de tan ricos deben ser pecado), las pizzas diferentes pero tan buenas como las de San Paolo.
Las fotos hablan por sí mismas.
A Julián de Dios le gustó tanto, que repitió dos días seguidos la visita a De Rosa Clásico. Nos dejó una escueta crónica, por aquello de que "lo bueno, si breve, dos veces bueno". Y deja que las fotos que sacó hablan por sí mismas.
Para mí los restaurantes no se dividen entre los premiados y los ignotos, los caros y los regalados, los modernitos y los sucuchos.
No, para mí lo único importante es si el chef / cocinero / alma mater está en el restaurante o no. Así de simple.
Y Maurizio de Rosa, desde que lo conozco, apenas llegó de Nueva York siempre está al mando. Y se nota.
En De Rosa Clásico, su más reciente apertura hay empanadas potentes, antipasti variados, pastas deliciosas (los conchigliette al ragú de carne de tan ricos deben ser pecado), las pizzas diferentes pero tan buenas como las de San Paolo.
Las fotos hablan por sí mismas.