Le Reve Bistró es sin dudas, una referencia calificada si hablamos de cocina francesa en Buenos Aires. Un perfecto ensamble entre técnica, producto y creatividad, desarrollada por el chef Ramiro Hernández. La novedad, ahora, es que a fin de mes se mudará justo enfrente, donde actualmente sigue funcionando Caldera. Sin perder su esencia y con una nueva casa más amplia.
Le Rêve Bistró - Dirección: Uriarte 1901, Palermo Soho (próximamente en Nicaragua 5001, esquina Uriarte) - Horarios: martes a sábados de 19.00 a 00:00 (nuevos horarios a partir de noviembre). Precio: $$$$. WhatsApp: 54 911 6129-4401. Reservas a través de: Reservas Le Rêve - IG: @lerevebistro
Dicen que la cocina francesa es técnica pura y refinamiento. El producto va a la par, porque sin insumos de calidad no puede haber resultados positivos. Solo que, en esta gastronomía en particular, falta audacia en los chefs para hacer innovaciones que, sin traicionar la esencia de cada preparación, pueden aportar un salto de calidad a sus platos.
Creemos que ésta, precisamente, es la diferencia que hace de Le Reve Bistró una opción diferente, ya que el chef Ramiro Hernández se la jugó con toques personales a un menú acotado que cumple a satisfacción con lo que los clientes piden.
Lo cierto es que, en cada visita, nos encontramos con una cocina en crecimiento cualitativo, de técnica impecablemente desarrollada y atrevida en su concepción. Nicolás, el dueño, es quien tuvo el sueño (porque eso quiere decir la palabra "Rêve"en francés). Y, como los sueños hay que cumplirlos, eso hizo.
Darío Núñez en el servicio; el "Tiger" (Marcelo Gil) en la barra, se ocupan de que todo salga como debe ser. Y eso se nota. A futuro inmediato, la ambientación va a cambiar porque, como se dijo, a fin de octubre se mudarán enfrente, con la intención cierta de abrir también al mediodía con una propuesta más simple. Ya veremos.
La experiencia comienza con pan brioche y tres delicadezas: manteca saborizada, paté de pato (como un foie gras que nos dan ganas de que sea más exuberante) y otro paté, de trucha. La carta incluye una decena de platos, sin discriminación de entradas y principales. Una tendencia que ha dado muy buenos resultados en la cocina moderna.
Así es que iniciamos la degustación con la infaltable soup a l' oigon, o en este caso denominada "sopa de cebolla Le Rêve", presentada en un tazón, con queso gratinado y croutons.
Los mejillones a la marinera (moules) están acompañados por una "nube" de papas fritas, cortadas finamente, y su crema marinera de sabor delicioso. Para continuar con un plato que ya habíamos probado: la pesca blanca en costra de papas, una original presentación un beurre blanc de ajos asados y puré de limón.
Una receta clásica como es el coq au vin, Ramiro la sirve con su impronta: es un pollo bebé relleno, con salsa de vino tinto, vegetales asados y aire de apio, innovaciones que potencian el sabor de un clásico de la cocina francesa.
Hay otras opciones en la carta, como el "Lomo Le Rêve", que es la versión del chef del lomo a la Wellington, un clásico británico, pero que los franceses reclaman como propio. Lleva lomo en su punto "bleu", duxelle, hojaldre, demiglace y puré de papas.
También hay bife de chorizo a la pimenta; rótolo de ricota y espinaca; puerros ahumados, y hongos y topinambur con huevos ritos. La tabla de quesos puede pedirse como entrada, o mejor a la francesa antes del postre.
Los postres son tres: soufflé de chocolate con vainilla; pavlova cítrica con curd de limón y crema de vainilla, y finalmente la "créme Le Rêve", éste último sujeto a disponibilidad.
Cuentan con una carta de vinos bien pensada; el plus de la coctelería del "Tiger", además de un servicio impecable. Sin dudas que estamos en presencia de un gran exponente de la cocina francesa, algo aún más valorable porque curiosamente Buenos Aires no tiene demasiadas opciones de este tipo. Celebramos que "Le Rêve" sea una rara avis.
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