Sabores nikkei en la terrazaMartes, 2 de febrero de 2021Un patio terraza en el corazón de Abasto nos sorprende con una propuesta a puertas "cerradas", pero que se abren por reserva para deleitar a los comensales con platos nikkei y de la culinaria criolla peruana.
Descubrimos Kamay el año pasado cuando aún estábamos en cuarentena estricta y solo se podía hacer delivery. A su vez, la marca había nacido después de cerrar "Kariñito Nikkei", el restaurante a puertas cerradas de Raúl Zorrilla Porta (ex chef de Olaya).
Nos decía Raúl en aquel momento que Kamay tenía el objetivo de llegar al público porteño con sabores tradicionales de la cocina peruana a precios muy accesibles, y de la mano de una cocina solo a leña, con el cuidado puesto desde la materia prima hasta el packaging.
La palabra Kamay proviene del dialecto quechua huanca y significa "crear". Y eso es lo que hace Raúl, joven cocinero peruano que llegó al país siguiendo a una hermana que residía entre nosotros, con el propósito de estudiar comercio exterior. Pero no le gustó y, a diferencia de la mayoría de sus colegas, la cocina lo atrapó no en su patria de origen sino en la Argentina.
Fue así que lo conocimos allá a mediados de 2018 cuando lo visitamos en Olaya, junto a sus compatriotas y colegas Eddie Castro y Rodrigo Ferrer, por entonces chef ejecutivo e itamae de Osaka, respectivamente.
Raúl ha dejado por el momento el delivery y comparte el tiempo entre La Catedral del Pisco y Kamay, ahora convertido en balcón terraza de un moderno edificio del Abasto.
Y el chef ahora nos deleita a pedido con sus creaciones nikkei y también platos de la culinaria criolla, que pueden degustarse en forma individual o combinada. El lugar funciona solamente por reserva y es algo así como ser recibido por Raúl en su propia casa. Dentro de las opciones, uno elige el menú pero lo más conveniente es optar por un omakase, dejándole la elección al dueño de casa.
Se trata de una nueva forma de disfrutar de esta cocina que tanto gusta a los porteños. En la ocasión, el chef nos agasajó con una degustación de nigiris, el infaltable cebiche, y por último una selección de rolls calientes.
A esto, quien lo desee puede agregar un lomo saltado, un arroz chaufa y otros platos de la cocina criolla peruana. Excelente propuesta a precio accesible, que hay que aprovechar en momentos en que el clima juega a favor.
Las novedades que vayan surgiendo las comunican a través de las páginas de Instagram y Facebook: ambas kamaysabor.
Las reservas se hacen a través del teléfono 11 5638 0582, o bien escribiendo en Facebook o Instagram.
Un patio terraza en el corazón de Abasto nos sorprende con una propuesta a puertas "cerradas", pero que se abren por reserva para deleitar a los comensales con platos nikkei y de la culinaria criolla peruana.
Descubrimos Kamay el año pasado cuando aún estábamos en cuarentena estricta y solo se podía hacer delivery. A su vez, la marca había nacido después de cerrar "Kariñito Nikkei", el restaurante a puertas cerradas de Raúl Zorrilla Porta (ex chef de Olaya).
Nos decía Raúl en aquel momento que Kamay tenía el objetivo de llegar al público porteño con sabores tradicionales de la cocina peruana a precios muy accesibles, y de la mano de una cocina solo a leña, con el cuidado puesto desde la materia prima hasta el packaging.
La palabra Kamay proviene del dialecto quechua huanca y significa "crear". Y eso es lo que hace Raúl, joven cocinero peruano que llegó al país siguiendo a una hermana que residía entre nosotros, con el propósito de estudiar comercio exterior. Pero no le gustó y, a diferencia de la mayoría de sus colegas, la cocina lo atrapó no en su patria de origen sino en la Argentina.
Fue así que lo conocimos allá a mediados de 2018 cuando lo visitamos en Olaya, junto a sus compatriotas y colegas Eddie Castro y Rodrigo Ferrer, por entonces chef ejecutivo e itamae de Osaka, respectivamente.
Raúl ha dejado por el momento el delivery y comparte el tiempo entre La Catedral del Pisco y Kamay, ahora convertido en balcón terraza de un moderno edificio del Abasto.
Y el chef ahora nos deleita a pedido con sus creaciones nikkei y también platos de la culinaria criolla, que pueden degustarse en forma individual o combinada. El lugar funciona solamente por reserva y es algo así como ser recibido por Raúl en su propia casa. Dentro de las opciones, uno elige el menú pero lo más conveniente es optar por un omakase, dejándole la elección al dueño de casa.
Se trata de una nueva forma de disfrutar de esta cocina que tanto gusta a los porteños. En la ocasión, el chef nos agasajó con una degustación de nigiris, el infaltable cebiche, y por último una selección de rolls calientes.
A esto, quien lo desee puede agregar un lomo saltado, un arroz chaufa y otros platos de la cocina criolla peruana. Excelente propuesta a precio accesible, que hay que aprovechar en momentos en que el clima juega a favor.
Las novedades que vayan surgiendo las comunican a través de las páginas de Instagram y Facebook: ambas kamaysabor.
Las reservas se hacen a través del teléfono 11 5638 0582, o bien escribiendo en Facebook o Instagram.