Salta cada vez más lindaLunes, 18 de febrero de 2019Los lectores de Fondo de Olla (c) habrán advertido que nos tomamos una semana de descanso. La idea era reponer pilas y probar cosas nuevas en la provincia más linda del país. Aquí va un adelanto de las próximas notas que se vienen. Y desde hoy, publicaremos notas al ritmo habitual.
Una vez más tomamos el avión hasta el aeropuerto Martín Miguel de Güemes y de ahí tras una breve estadía en San Lorenzo en Loma Balcón, reanudamos el viaje hasta Cafayate, el pueblo de "gente buena" que "lo tiene todo". Los acontecimientos familiares de la familia Domingo, a los que tanto queremos, fueron la perfecta excusa para compartir momentos gratos y descubrir lugares nuevos (o no tanto), atiborrarnos de empanadas salteñas, tamales, humitas y cabrito, y disfrutar de esos paisajes sensacionales que nos depara el NOA.
Es tiempo de vendimia y mejor aún, en un año que se avecina como muy bueno para los vinos del 2019. Volvimos a probar el Cesanese de la línea Yeta, una extraña mezcla de Italia y Salta, absolutamente inédita: http://www.fondodeolla.com/nota/15607-un-cesanese-nada-comune/.
Y los quesos de Cabras de Cafayate, por supuesto, que probamos en repetidas ocasiones en restaurantes de la capital de la provincia y en el lugar de origen de la fábrica que los Domingo han construido en una de las fincas de la familia.
Por el lado gastronómico, la primera visita fue a Ma Cuisine, el restaurante de estilo francés que comanda el chef y sommelier Roberto Boujon en Salta Capital.
Ya en Cafayate, ineludible pasar por El Rancho, para comer los platos regionales de siempre. También por el restaurante más antiguo del pueblo: La Carreta de Don Olegario. Y no nos fuimos sin volver a degustar los Huevos Po Parisky, ese plato clásico del Plaza Grill, que nos prepara justamente un excocinero del hotel de Plaza San Martín, Carlos Amante, propietario de El Terruño.
La gran novedad en esta visita fue el nuevo local de Pacha, el restaurante del chef Tomás Casado, que ahora está más visible sobre la Ruta 40 (Güemes Sur), a media cuadra de la Plaza 20 de Febrero. Sin dudas, un restaurante de alto nivel que sobresale en la gastronomía salteña.
Ya de vuelta en Salta, tuvimos la chance de visitar por primera vez House of Jasmines, donde Marcela Velarde nos recibió con su calidad profesional que ya conocíamos de Grace, en Estancia de Cafayate, hace algunos años. El lugar fue propiedad tiempo atrás del actor Robert Duvall, junto a su esposa en ese momento, de origen salteño. Hoy la posada y restaurante en La Merced Chica, pertenece a la familia Fenestraz.
En La Table, el restaurante de la posada, el chef Andrés Gutiérrez, nos sorprendió con la mejor cocina de la provincia. El cabrito braseado con papas rústicas y brochette de vegetales se llevó las palmas dentro de un menú sobresaliente.
Esto es solo un adelanto, en los próximos días seguiremos contando nuestras experiencias salteñas. Y va un dato para aquellos que dicen que el NOA es muy caluroso en verano y no es conveniente visitar la provincia de Salta en esta época. Con una siesta reparadora se soluciona el efecto del sol de la tarde. Las mañanas son frescas y las noches nos permiten dormir plácidamente. Hagan la prueba y verán.
Asimismo, los precios son muy accesibles, quizá los más bajos de todo el país, sobre todo en gastronomía.
Qué más se puede pedir. Continuará.
Los lectores de Fondo de Olla (c) habrán advertido que nos tomamos una semana de descanso. La idea era reponer pilas y probar cosas nuevas en la provincia más linda del país. Aquí va un adelanto de las próximas notas que se vienen. Y desde hoy, publicaremos notas al ritmo habitual.
Una vez más tomamos el avión hasta el aeropuerto Martín Miguel de Güemes y de ahí tras una breve estadía en San Lorenzo en Loma Balcón, reanudamos el viaje hasta Cafayate, el pueblo de "gente buena" que "lo tiene todo". Los acontecimientos familiares de la familia Domingo, a los que tanto queremos, fueron la perfecta excusa para compartir momentos gratos y descubrir lugares nuevos (o no tanto), atiborrarnos de empanadas salteñas, tamales, humitas y cabrito, y disfrutar de esos paisajes sensacionales que nos depara el NOA.
Es tiempo de vendimia y mejor aún, en un año que se avecina como muy bueno para los vinos del 2019. Volvimos a probar el Cesanese de la línea Yeta, una extraña mezcla de Italia y Salta, absolutamente inédita: http://www.fondodeolla.com/nota/15607-un-cesanese-nada-comune/.
Y los quesos de Cabras de Cafayate, por supuesto, que probamos en repetidas ocasiones en restaurantes de la capital de la provincia y en el lugar de origen de la fábrica que los Domingo han construido en una de las fincas de la familia.
Por el lado gastronómico, la primera visita fue a Ma Cuisine, el restaurante de estilo francés que comanda el chef y sommelier Roberto Boujon en Salta Capital.
Ya en Cafayate, ineludible pasar por El Rancho, para comer los platos regionales de siempre. También por el restaurante más antiguo del pueblo: La Carreta de Don Olegario. Y no nos fuimos sin volver a degustar los Huevos Po Parisky, ese plato clásico del Plaza Grill, que nos prepara justamente un excocinero del hotel de Plaza San Martín, Carlos Amante, propietario de El Terruño.
La gran novedad en esta visita fue el nuevo local de Pacha, el restaurante del chef Tomás Casado, que ahora está más visible sobre la Ruta 40 (Güemes Sur), a media cuadra de la Plaza 20 de Febrero. Sin dudas, un restaurante de alto nivel que sobresale en la gastronomía salteña.
Ya de vuelta en Salta, tuvimos la chance de visitar por primera vez House of Jasmines, donde Marcela Velarde nos recibió con su calidad profesional que ya conocíamos de Grace, en Estancia de Cafayate, hace algunos años. El lugar fue propiedad tiempo atrás del actor Robert Duvall, junto a su esposa en ese momento, de origen salteño. Hoy la posada y restaurante en La Merced Chica, pertenece a la familia Fenestraz.
En La Table, el restaurante de la posada, el chef Andrés Gutiérrez, nos sorprendió con la mejor cocina de la provincia. El cabrito braseado con papas rústicas y brochette de vegetales se llevó las palmas dentro de un menú sobresaliente.
Esto es solo un adelanto, en los próximos días seguiremos contando nuestras experiencias salteñas. Y va un dato para aquellos que dicen que el NOA es muy caluroso en verano y no es conveniente visitar la provincia de Salta en esta época. Con una siesta reparadora se soluciona el efecto del sol de la tarde. Las mañanas son frescas y las noches nos permiten dormir plácidamente. Hagan la prueba y verán.
Asimismo, los precios son muy accesibles, quizá los más bajos de todo el país, sobre todo en gastronomía.
Qué más se puede pedir. Continuará.