Los cultivos andinos llegan a Buenos Aires para que el público masivo conozca las bondades de estos alimentos generados por la agricultura familiar del NOA. Desde hoy hasta el miércoles 29 se realizarán actividades en el Obelisco y otros puntos de la ciudad.
Hace algunos años, tuvimos la fortuna de probar por primera vez los alimentos generados en el norte del país, concretamente en la Quebrada de Humahuaca. En esos tiempos, ni siquiera las papas andinas habían llegado a la gran ciudad y eran una rareza.
Conocimos luego CAUQUEVA, la cooperativa de productos minifundistas con sede en Maimará, provincia de Jujuy. Nuestro proveedor directo era el colega Matías Longoni, cuyo hermano en aquel entonces trabajaba en el NOA.
Recibíamos maíces, papa, lechuga, todo tipo de vegetales cultivados de manera artesanal en la Quebrada y los valles. Por desgracia, la entrega se discontinuó porque las grandes distancias elevaban el costo de los productos y no todos estaban dispuestos a pagar ese plus.
Con el auge posterior de la Cocina Peruana, algunos de estos productos comenzaron a verse en Buenos Aires, al tiempo que los restaurantes compraban maíces, papas y otros alimentos en la calle José León Suárez, en el barrio de Liniers.
Esta semana, desde hoy lunes y hasta el miércoles 29 de agosto, se presenta los cultivos andinos, a través de una muy buena iniciativa del Ministerio de Agroindustria de la Nación, mientras el Gobierno de laCiudad sigue adelante con programas ridículos como "Buenos Aires Capital Gastronómica" o el Torneo Federal del Asado.
Habrá entonces una agenda de actividades en el Obelisco y otros puntos de la ciudad: desayunos saludables Madre Tierra, clases de cocina andina, degustaciones abiertas al público de papines, quinua, maíz kully morado, amaranto y locoto, entre otros productos de origen cordillerano.
Todos los días, distintos grupos de baile y música norteña, acercarán a la zona del Obelisco y de Retiro, las costumbres y tradiciones norteñas.
Los asistentes a las actividades tendrán la oportunidad de acceder a productos frescos como quinua y amaranto) o elaborados como harina de quinua y puré deshidratado de oca) que serán comercializados para beneficio de los productores visitantes, provenientes de las provincias de Salta y Jujuy que ofrecerán sus variedades de producción con el acompañamiento y colaboración del Ministerio de Agroindustria Nacional a través del Programa de Inserción Económica de los Productores Familiares del Norte Argentino (PROCANOR).
Los productos son muchos pero se ha priorizado a la quinua, papa andina, oca, yacon, maíces y porotos, por ser los de mayor desarrollo. Estos cultivos se podrían definir como productos nativos de la zona, que se caracterizan por su biodiversidad y heterogeneidad que los hace altamente resistentes a todas las condiciones desfavorables agroclimáticas.
Todos los cultivos andinos se caracterizan por su adaptación a zonas agroclimáticas desfavorables. El 60% de la producción del NOA se concentra en Jujuy, 35% en Salta, 10% en Catamarca y el 5% restante se comparte entre Tucumán y La Rioja.
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La agenda de trabajo contempló el estado de situación de las negociaciones con distintos países, la ampliación de cuotas y un repaso de los mercados priorizados por el sector, así como aquellos con potencial de crecimiento en los próximos años.
Parece que ayer fue el Día Mundial sin Carne (¿??), una irrelevante fecha inventada por otra irrelevancia como es la ignota Unión Vegana Argentina, que se encarga de distorsionar la realidad alimentaria del ser humano, con el objetivo de promocionar a esta secta de fanáticos fundamentalistas que cree que los omnívoros somos una especie de asesinos seriales. Pero la naturaleza es sabia y, si unas especies se devoran a las otras, por algo será. Nosotros, digan lo que dijeren, seguiremos disfrutando de un asadito.
