Cerveza caliente

Poco a poco se están escuchando voces que denotan el enojo que provoca la intención del Gobierno nacional de aumentar la alícuota (y en algunos casos como el vino y los espumosos de aplicar desde cero), que grava a las bebidas con impuestos internos.

En este caso y mientras las organizaciones del vino guardan silencio, salvo Bodegas de Salta (que rechazó la medida anunciada la semana última), la Cámara de Cervecerías Artesanales de la Argentina manifestó su "más profunda preocupación por el carácter regresivo que entendemos que tendrían dichas medidas y del impacto negativo que las mismas ocasionarán a nuestra actividad".

Los cerveceros consideran que este aumento de la alícuota "perjudicaría el consumo y por sobre todas las cosas, desalentaría las inversiones y la formalización que, con mucho sacrificio, venimos procurando como colectivo".

Recuerda el documento que reiteradamente, diferentes funcionarios y miembros del Gobierno nacional se han manifestado en diversos medios sobre "la necesidad de apalancar y fortalecer el desarrollo de nuestras compañías, señalándonos incluso como ejemplos del espíritu emprendedor que el país necesita".

Destacan que el segmento de la cerveza artesanal "es claramente un emergente en estos días; el mercado está creciendo y es receptivo a la cantidad de propuestas que nacen aquí y allá en cada rincón del país".

Y agregan: "somos protagonistas en nuestra comunidad, generando impacto local, inversión, empleo y cultura. Somos parte de un fenómeno que no dejará de crecer, pero que muy lejos está de haber llegado a un punto de madurez. Es mucho el camino que nos falta por recorrer".

Señala la Cámara que "lo último que necesitamos son medidas que compliquen la fragilidad económica y financiera de las muchas compañías medianas y pequeñas que están dando sus primeros pasos".

Continúa diciendo la Cámara que "nos parece un castigo innecesario, profundamente inoportuno y que además no tiene el menor impacto desde el punto de vista de la recaudación y el equilibrio fiscal. La carga impositiva total sobre nuestro sector es del 52,3%; la tasa efectiva de impuestos internos en la actualidad es de 8,7%, y con el aumento propuesto avanzaría a 20,48%".

Se afirma más adelante que "acompañamos el objetivo del gobierno por avanzar gradualmente hacia un escenario de equilibrio fiscal, pero de entenderse que, de subirse la alícuota, es menester que se comprenda que dicho incremento debe distinguir entre las tres empresas multinacionales que dominan y concentran el 98% del volumen de nuestro mercado y los cientos de familias y miles de trabajadores que día a día están dando una pelea por hacerse un lugar en el mercado y poner en marcha nuestra actividad".

Un incremento de los impuestos internos, se dice, traería como consecuencia el aumento del precio de la cerveza artesanal y por ende la caída de la demanda, afectando esto a toda la cadena de producción de las PyMes cerveceras.