Cierres y más cierres de restaurantes

El último que apague la luz

Jueves, 19 de octubre de 2017

Al cierre del centenario Pedemonte, ya comentado hace algunos días, se sumó Hermann, otro clásico de Buenos Aires que llevaba más de 80 años de trayectoria. Y Social Paraíso, que tuvo sus años de apogeo en Palermo Hollywood.

A ritmo acelerado pero así y todo muy lejos de aquellos nunca confirmados 400 restaurantes que cerraron el año pasado, según una información que diera a conocer en su momento la Cámara de Restaurantes, este 2017 está marcado por la desaparición de lugares históricos de la ciudad.

En abril cerró la Münich de Recoleta, lo que marcó no solo la decadencia final de la gastronomía del barrio sino también el desinterés del público por la cocina alemana, que nunca supo aggiornarse y aburrió con sus salchichas, chucrut (que en origen se llama sauerkraut) y por ahí, con suerte, algunas kassler o un jamboneau.

En mayo cerró, provisoriamente esperamos, el viejo y querido Grill del Plaza, ya que los propietarios del hotel prometieron hacer reformas los próximos tres años, sin destruir ese restaurante y su bar aledaño que son museos de la gastronomía porteña.

Cuando la cosa parecía haberse tranquilizado, nos quedamos sin Pedemonte, el centenario restaurante de la Avenida de Mayo, que empero había perdido su elegancia en el camino a través de nuevos propietarios que lo usaban para hacer shows bizarros.

Y ahora siguió el mismo camino Hermann, casualidad o no, un bodegón inscripto en parecido estilo a de los Münich, es decir cocina porteña con algunos platos alemanes que tampoco salían mucho de lo ya mencionado.

El Hermann tenía más de 80 años, por lo que se va otro lugar que forma parte de la gastronomía de Buenos Aires. Hace algunos años había tenido una escisión, que culminó con la apertura y el cierre un tiempo después, del llamado Nuevo Hermann.

El nombre respondía al apellido de los dueños originarios, que se mantuvo aun con los recurrentes cambios de sociedad. Su último propietario, Manuel Barral, señaló que no le renovaron el alquiler porque, según se comenta, harán una torre en esa esquina icónica de Santa Fe y Armenia.

Lo curioso (y triste a la vez) es que los empleados se enteraron a la mañana del día después, al no levantarse las persianas del local. Se dice que aún esperan cobrar la indemnización.

Los habitués lo extrañarán, los que íbamos muy de tanto en tanto también. Lastimosa historia de los restaurantes alemanes de la ciudad, entre los que aún se mantienen el ABC de la peatonal Lavalle y Edelweiss, un clásico de Libertad famoso por la presencia de figuras mediáticas.

Solo Zirkel, en el piso 22 del Club Alemán, mantiene las banderas en alto para esta cocina que tuvo alguna vez su momento de esplendor.

Otro lugar que cerró sus puertas hace pocos días fue Social Paraíso, fundado por Federico Simoes hace casi veinte años, los que no llegó a cumplir. Muchos chefs de fuste pasaron por ahí, incluido Darío Gualtieri. Otro cierre penoso.

Un lugar que nos dolió mucho por su desaparición, aunque en este caso por el cambio de concesión, fue Le Bistrot, queridísimo espacio en la Alianza Francesa que tenía a su cargo Patricia Courtois.

Las autoridades de ese instituto le hicieron la vida imposible hasta que Patricia dijo basta. No se puede mantener la rentabilidad si no te dejan vender vino al mediodía y te dejan sin chance de abrir de noche. Hoy funciona una sucursal de Fleur de Sel, que por ahora solo abre para almuerzos y servicios de desayunos y meriendas.

Otro lugar, conocido por la muchedumbre que llenaba sus instalaciones y mucho menos por su propuesta era Único, en la esquina de Honduras y Fitz Roy, donde hoy ya tiene reemplazante. Aún se mantienen abiertas las sucursales de Puerto Madero y San Isidro.

Ya no están más tampoco In Bocca al Lupo, uno de los mejores lugares para beber un excelente café en la ciudad y comer sencillos y ricos platos italianos; así como Ficattola, en la esquina de Zabala y Amenábar, donde parece que también van a construir un edificio en el mismo local que durante mucho tiempo tuvo a Luciana.

Recuérdese que a principios de año había cerrado Olsen, luego de la denuncia de un cliente mediático que hizo pública la presencia de ratas en el jardín. Se dice que el predio ya habría sido vendido y se verá para qué fin.

Hay algunos lugares que cambiaron de nombre, como Bardot, que hoy es Cocos, que sigue con su propuesta peruana; otros como el Club Sueco que cerró transitoriamente sus puertas hasta que se mudó a la sede de la Iglesia Sueca en Garay y Bouchard, o los inminentes cambios de domicilio de Aramburu y Aramburu Bis, que pasarán al Pasaje del Correo, en Recoleta.

Los cambios siguen siendo notorios y traumáticos. El negocio gastronómico no está en un buen momento, pero eso viene ocurriendo desde hace más de una década. De manera que hay que valorar el esfuerzo de los que continúan adelante y los que se vienen con nuevos proyectos. Pronto abrirá Aldos's Vinoteca & Restaurant en su locación de Arévalo casi Nicaragua al lado de La Mar, mientras que precisamente este mismo grupo abrirá en breve Tanta, otro de los formatos de Gastón Acurio, en la esquina de Paraguay y Esmeralda donde está el Edificio Bellini.

Más de Gastronomía
Y al final, la Guía Michelin era un Circo
Gastronomía

Y al final, la Guía Michelin era un Circo

El restaurante Victoria & Albert's, localizado en el Hotel Disney's Grand Floridian Resort & Spa, acaba de recibir 1 Estrella Michelin. Es la primera vez que Disney obtiene este logro. No creemos que un jurado haya ido solo a comer y no llamara la atención (no olvidar que van solos, algo poco creíble en un resort Disney. Como sabemos, en nuestro país, la primera edición de la Guía el año pasado (no sabemos si habrá segunda porque hay que poner 600.000 de los verdes), había defraudado por sus contradicciones y falacias.
Grandes Encuentros en Palladio Hotel Buenos Aires MGallery
Gastronomía

Grandes Encuentros en Palladio Hotel Buenos Aires MGallery

El miércoles 24 de abril, a las 20:30, el chef ejecutivo del hotel recibirá la visita de Darío Gualtieri en la cocina de Negresco Bistró. Ambos ofrecerán un menú degustación de cinco pasos, junto a la Bodega Altos Las Hormigas.
Para irse de tapas como en Barna
Gastronomía

Para irse de tapas como en Barna


Se sabe que "Barna" es una abreviatura de Barcelona, la ciudad que conjuga el mar con la gastronomía y el fútbol (legado de Messi aunque ya no esté). El restaurante abrió sus puertas en diciembre de 2023 para rendir homenaje a la Ciudad Condal, desde la cocina y el arte que se desprende de sus paredes.