Una apuesta al Garnacha

"Cabaret, metejón, era la eterna rutina, pucherito de gallina, con viejo vino Carlón". ¿Quién no ha escuchado estos versos del tango "Pucherito de gallina", de Roberto Medina, en boca del inolvidable Edmundo Rivero?

El Carlón de marras fue un vino muy famoso y consumido en el país, aun antes de que fuéramos "Argentina". Y se elaboraba con uvas Garnacha, precisamente.

Según el diccionario de la Real Academia Española, "garnacha" tiene varios significados, además de ser una cepa de origen español. Entre ellos, una comida mexicana hecha en base a maíz, la melena que cuelga sobre los hombros, una vestidura con mangas y cuello grande, y una compañía ambulante del teatro barroco español, integrada por cinco o seis hombres, una mujer y un muchacho.

Catena Zapata nos ha sorprendido con un nuevo exponente de la línea D. V. Catena, nada menos que un blend 50% Malbec, 50% Grenache.

Según expresa la bodega para explicar el porqué de esa elección, la garnacha es una de las variedades de uva más plantadas en el mundo, que posee un origen claramente mediterráneo. España fue su cuna y en particular en los tiempos de la Corona de Aragón (1164-1707).

Su expansión fue paralela al dominio de este reino y desde el siglo XII y el XVII fue arraigándose en Francia, Cerdeña, sur de Italia, Sicilia y Grecia. Años más tarde llegaría a África, California, Chile, Canadá, la Argentina, México y Australia, donde, fue la variedad más plantada hasta el año 1960, momento en que empezó a tener mayor presencia el Syrah.

Hay dos versiones sobre el origen de su nombre y los ampelógrafos se inclinan igualmente por una y otra.

La más antigua, sostiene que su nombre se debe a una mutación de "Granate", que es el color que presentan sus bayas. La segunda versión dice que el nombre Garnacha - Grenache, se origina en los años en que los ingleses importaban vinos tintos de las montañas de Málaga y Granada, y de la mala pronunciación de esta última ciudad habría devenido la denominación de la variedad.

Tiene racimos de tamaños medios, compactos y con bayas de tamaño mediano, de forma ovalada y color rojo oscuro. Es resistente al frío y a la falta de agua. En condiciones cálidas y secas, siempre que se controlen los rendimientos, puede producir vinos que se caracterizan por su suavidad, sus dulces taninos y sus aromas ligeramente picantes.

Es la variedad principal del famoso "Châteauneuf-du-Pape", la denominación francesa que permite trece variedades y cuyo blend mayoritariamente es constituido por grenache. Constituye también la DOC "Cannonau di Sardegna", que por ley exige que el 99% de las uvas de sus vinos, sean de esta variedad.

En la Argentina, donde encontró un clima cálido y seco, con suelos pobres que bajan su gran productividad, alcanza una excelente maduración para producir vinos de mucha graduación alcohólica, intenso color y gran intensidad aromática.

En envejecimientos cortos, mantiene el color y aparecen notas a frutas maduras, manzanas rojas y toques minerales que lo hacen muy interesante.

El D. V. Malbec- Grenache se elaboró con uvas Malbec de las fincas "Angélica Sur" (San Carlos, 1.090 metros snm), y Grenache de "La Antonia" (Rivadavia, 750 metros de altitud).

El añejamiento se hizo durante seis meses en barricas de roble de segundo y tercer uso. Según los datos de cata del enólogo, se trata de "un vino elegante y de equilibrada acidez, que combina la potencia y estructura del Malbec de zonas frías con los taninos suaves y confitados e intensos aromas frutales con dejos a nuez moscada que caracterizan a la variedad Grenache".

Y presenta una "entrada suave en boca;, es de mediana persistencia y muy equilibrado".